- El fútbol, por sí solo, regala historias que se quedan impregnadas para toda la vida en la retina de quienes forman parte de ella. No en vano, la Copa del Rey, competición que ofreció uno de los recuerdos más bonitos para la parroquia alavesista con aquella final en el Vicente Calderón en 2017, vuelve a cruzar los caminos de Alberto González, técnico del Linares, y el Deportivo Alavés, que será el próximo rival a batir del modesto club andaluz. Los andaluces no comenzaron la temporada de la mejor forma posible, pero el regreso al banquillo de Alberto González ha permitido que los azulillos le hayan retomado el pulso a la competición. Curtido en la secretaría técnica de clubes como el Málaga, Betis y Alcorcón, quien fuera el técnico del Jaén en aquella fatídica eliminatoria para el recuerdo alavesista volverá a verse las caras con el conjunto babazorro, y repasa en DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA el duelo que se disputará mañana en Linares.

Alberto González confiesa que afronta este excitante desafío con muchas ganas e ilusión. "Son partidos que no vivimos todos los días y son situaciones que se dan muy de vez en cuando. Queremos disfrutarla al máximo", asegura. De hecho, su equipo se encuentra inmerso en una dinámica ascendente. Tras cosechar trece puntos de quince en las últimas cinco jornadas, el margen respecto al descenso le ha dado cierto respiro y explica que el momento de forma de sus pupilos es el idóneo. "El estado de confianza del equipo es muy alto. Veníamos de una dinámica bastante negativa donde nos estaba costando mucho puntuar y ahora es todo lo contrario. Estamos en un grandísimo momento, plenos de confianza. Es cierto que jugamos hace pocos días y que hay algo de cansancio, pero con la ilusión que tenemos se puede suplir", matiza el jefe de orquesta del Linares.

Quizá el hecho de compaginar dos competiciones le pudo pasar factura, pero González comenta que esto mismo le salió a las mil maravillas. "La semana pasada nos salió genial. En seis días tuvimos tres partidos y conseguimos ganar los dos de liga y pasar de ronda en La Copa", declara. Y es que según relata, la clave reside en el colectivo. "Al final, como dependemos más del conjunto que de jugadores individuales que marcan la diferencia, el hecho de rotar incluso nos da más de lo que nos quita. Eso mismo nos concede la posibilidad de que más jugadores entren en dinámica y eso siempre ayuda. Algo de desgaste siempre hay, pero lo positivo es que todos los jugadores entren en dinámica y se sientan titulares", comenta Alberto González.

Por contra, el Alavés llega al compromiso copero tras empatar in extremis ante el Getafe. Respecto al estado de forma del Glorioso, González precisa que tiene "el máximo respeto a un equipo de la Primera División", con todo lo que eso supone. "Tienen jugadores de mucho talento que están por encima de lo que podemos estar nosotros. Tuve la fortuna de ver al Alavés en directo en Granada y creo que mereció ganar de largo. Fue espectacular. Hizo una segunda parte increíble en la que pasó por encima del rival", rememora el técnico del Linares. "Sin embargo, en el fútbol hay que acertar y meter el balón en la portería, pero a mí me gusta mucho la propuesta de Javi Calleja. Es fantástica, de juego vertical y con mucha calidad en las asociaciones arriba", manifiesta.

Respecto a la vocación futbolística del Linares, González recuerda que a su equipo le gusta sentirse importante durante el transcurso del partido. "Nos gusta tener el protagonismo con el esférico. Pero no tener el balón por tenerlo, sino para que nos permita ser verticales. Mi idea es la de no rifar el balón, intentar progresar con él buscando ventajas y situaciones que nos permitan progresar en el campo contrario", expresa.

Por otro lado, Alberto González, curtido en los banquillos de equipos andaluces como El Ejido, San Fernando y Jaén, pasó del club lagarto al azulillo en apenas un año, un movimiento llamativo por la rivalidad entre ambos, pero que no pudo ser más satisfactorio en lo personal y lo profesional para el técnico. "En enero del 2020 me surgió la posibilidad de ir a un equipo fuerte de 2ªB como el San Fernando, que era un proyecto potente. No es habitual que paguen traspaso por un entrenador pero hubo un acuerdo que me permitió volver a 2ªB en la misma temporada que estaba con el Jaén. Pasé por el San Fernando y una vez que acabé la temporada por el tema del covid-19 y demás hubo cambios, por lo que salí de nuevo al mercado. En aquel verano, el Linares ascendió a 2ªB, se acordó de mí y me llamó. El año pasado hice la segunda vuelta con ellos y esta temporada de inicio no empecé aquí porque había equipos de Segunda y otros punteros de Primera RFEF que se interesaron por mi situación y estaba en esas quinielas. Sin embargo, cuando me volvió a llamar el Linares regresé con los ojos cerrados para crecer mano a mano con un equipo humilde", detalla.

De hecho, en su actual equipo dispone del apoyo absoluto de su afición. En cuanto al papel que la grada pueda acometer en la histórica visita del Alavés al estadio de Linarejos, Alberto González invita a que el feudo azulillo sea una caldera en la visita del conjunto gasteiztarra. "Espero que sea un partido muy bonito, que quede en el recuerdo para transmitirlo a los hijos y nietos. Hay que estar ahí para vivirlo. Quizá sea una gran noche para el recuerdo. No todos los días se tiene la oportunidad en una ciudad tan pequeña y con un fútbol más modesto para enfrentarnos a un equipo de Primera División", concluye el técnico del Linares.

Curso 2019-20. El duelo de este martes no será el primero en el que Alberto González se enfrente al Alavés. Hace dos campañas, cuando dirigía al Jaén, González se convirtió en el verdugo de los vitorianos tras un partido que concluyó con un resultado de 3-1 y en el que sus pupilos se mostraron superiores pese a la diferencia en cuanto a la categoría. De hecho, González recuerda aquel choque como uno de los más emocionantes que le ha brindado el deporte rey. "Fue un día fantástico, de los días más bonitos que me ha regalado el fútbol. Tener la posibilidad de que con un equipo de Tercera ganásemos a uno de Primera y de la forma en la que lo hicimos, de no sentirnos avasallados, fue muy bonito. Ha sido de los partidos de fútbol que más he disfrutado en el campo, una sensación muy bonita. Son cosas puntuales que se dan en un día determinado y es con lo que soñamos y trabajamos", confiesa el actual entrenador del Linares.

"El estado de confianza de mi equipo es muy alto, estamos en un grandísimo momento"

"El Alavés tiene jugadores de mucho talento que están por encima de nosotros"

"Espero que el partido quede en el recuerdo para transmitirlo a los hijos y nietos"

Entrenador del Linares