el encuentro de hoy se antoja trascendental para el Deportivo Alavés, pero también para el Mallorca, actualmente en puestos de descenso un punto por detrás del Glorioso. El conjunto balear ha regresado a la máxima categoría del fútbol español cargado de ilusión, pero no han tardado en darse cuenta de lo cara que es la permanencia. Sin embargo, si hay un equipo que no va a perderle la cara a la competición ese es el Mallorca de Vicente Moreno, que ha pasado de Segunda B a Primera División en tan solo dos temporadas. Un ascenso meteórico al alcance de muy pocos, en el que el técnico ha tenido mucho que ver, pero han sido los jugadores los que han tirado del carro con su valentía y ambición. De hecho, muchos de los hombres que rescataron al club de la categoría de bronce, como el guardameta Manolo Reina, Joan Sastre, Fran Gámez, el incombustible Salva Sevilla, Marc Pedraza, Lago Junior, Ariday Cabrera, Abdón Prats y el capitán local Xisco Campos, todavía se mantienen en la entidad, algunos con mucho peso.

El técnico valenciano ha confiado en los futbolistas y en el estilo de juego ofensivo que devolvieron al Mallorca a Primera División y posiblemente lo seguirá haciendo mientras haya un asiento reservado para él en el banquillo bermellón. Puede que el Mallorca no tenga la plantilla más dotada técnicamente de Primera y tampoco ha realizado fichajes extravagantes, más allá de la cesión de Kubo por parte del Real Madrid, ni cuenta con nombres que son muy repetidos en el mundo del fútbol como puede ser el caso de Joselu, Lucas Pérez, Pacheco, Laguardia o Vidal en el Alavés, pero su propuesta se asemeja más a la de los equipos que van a pelear por posiciones europeas que a la de los que tienen como objetivo la permanencia.

Sin embargo, puede que esta sea precisamente la razón por la que el Mallorca es uno de los equipos más goleados de la competición, ya con diez goles en contra en seis jornadas. En su último encuentro contra el Atlético de Madrid intentaron buscar la portería rival por todos los medios y en la segunda mitad pusieron a los colchoneros contra las cuerdas, pero su falta de efectividad en los metros finales contrastó con la letalidad de un Atlético que no perdona y que evidenció las carencias de un Mallorca atrevido.

Kubo, elemento diferencial Al equipo de Vicente Moreno no le gusta rifar el balón y el pelotazo en largo es un recurso al que solo recurre cuando no le queda otra opción. Salva Sevilla es el encargado de dirigir toda la creación de juego del Mallorca. Con una dilatada trayectoria y años de experiencia en Primera, al andaluz no le tiembla el pulso a la hora de ofrecerse y arriesgar con el pase en zonas peligrosas. Baba es su guardaespaldas en defensa y sus grandes aliados en ataque Dani Rodríguez, Febas y Lago Junior, encargados de poner en apuros al rival y surtir a Budimir. El croata ha marcado dos tantos, pero en Son Moix esperan con ansia que se recupere de su lesión Cucho Hernández, llamado a ser la gran referencia ofensiva de los bermellones esta temporada. Por fortuna para el Alavés, no estará hoy en Mendizorroza.

El hombre que atrae todas las miradas, en cualquier caso, es la perla japonesa Takefusa Kubo. Adquirido por el Real Madrid el último verano, el zurdo de 18 años está llamado a ser un jugador determinante en los próximos años y ya ha dado muestras de su potencial en Mallorca. El joven atacante entró desde el banquillo en las primeras jornadas y el pasado miércoles partió por primera vez como titular desde la banda derecha. El talento de Kubo está fuera de toda duda, y es que cada vez que el balón llega a sus pies el Mallorca crea peligro. Por otro lado, el diamante todavía está sin pulir y no es raro verle tomar decisiones erróneas como disparar a portería desde lejos teniendo varios compañeros desmarcados en mejor situación. En cualquier caso, el japonés será un dolor de cabeza para los de Garitano si repite titularidad hoy en Mendizorroza.

Puede que el Mallorca no cuente con demasiados recursos. De hecho, es el equipo con menor límite salarial de Primera según los datos de LaLiga (29,9 millones frente a los 49,7 del Alavés). Sin embargo, saben explotar al máximo sus cualidades y si no han tenido reparos en jugar de tú a tú al Atlético de Madrid tampoco los van a tener en plantarle cara al Glorioso en su fortín. Los tres puntos que se juegan esta tarde en Mendizorroza son oro puro para ambos equipos.