Vitoria - El Deportivo Alavés sigue tocando puertas de distintos futbolistas para apuntalar la plantilla de la próxima temporada y ha encontrado en Pere Pons un jugador dispuesto a recalar en el club y reforzar el centro del campo albiazul, según se hizo eco ayer la emisora catalana RAC1. El catalán se encuentra en estos momentos negociando su rescisión con el Girona para poder recalar en Vitoria-Gasteiz, donde a priori tendría un papel de peso.
El gerundense de 26 años es actualmente una de las gangas del mercado. El descenso del Girona ha hecho que su cláusula haya descendido hasta los dos millones de euros, una cantidad irrisoria para un futbolista todavía joven que ha sido titular indiscutible en Primera División durante las dos últimas campañas. De hecho, también ha levantado el interés de Eibar y Valladolid. Pons ha estado en el Girona desde sus categorías inferiores y fue uno de los protagonistas en el ascenso del club de su tierra a la máxima categoría, por lo que será duro cambiar de aires, pero está decidido a continuar en Primera.
Su situación es similar a la vivida por su compañero de equipo Portu, que vio reducida su cláusula de rescisión a la mitad, lo que permitió a la Real Sociedad abordar su fichaje hace unas semanas. En los conjuntos recién descendidos siempre se pueden encontrar futbolistas de primer nivel a un precio asequible y el director deportivo del Alavés, Sergio Fernández, es un habitual en estas subastas. Sin ir más lejos, el año pasado ya afrontó las contrataciones de Jony Rodríguez y Jonathan Calleri, procedentes de los descendidos Málaga CF y Las Palmas respectivamente. De hecho, ambos futbolistas terminaron convirtiéndose en dos de las piezas más importantes del esquema de Abelardo.
Frescura para la medular El centro del campo es una de las zonas que más urgentemente necesita refuerzos en la plantilla gasteiztarra. Tras el regreso de Brasanac al Betis tras cesión, Asier Garitano cuenta actualmente con Manu García, Tomás Pina y Wakaso, además de Dani Torres y el recientemente fichado Jeando Fuchs, cuya presencia en el primer equipo es una incógnita. El colombiano no cuenta para el club y el africano deberá ganarse un hueco durante la pretemporada si no quiere salir cedido.
Con Pere Pons, la medular ganaría en juventud y en visión de juego. Wakaso, de 28 años y Manu, de 33, son futbolistas de corte defensivo con los que el Alavés gana en músculo, pero se atasca en la creación cuando ambos están en el terreno de jugo. El papel de Pina, más organizador, fue imprescindible durante el curso pasado para conectar con los delanteros y dar fluidez al juego. Sin embargo, el de Ciudad Real es más frágil físicamente y suele necesitar descanso regularmente.
El catalán es un jugador entregado en tareas defensivas, uno de los favoritos de la afición del Girona, además de ser un futbolista con técnica y capacidad organizadora. El que fuera indiscutible para Eusebio y Machín, dos técnicos defensores del fútbol de posesión, es significativo de lo que este futbolista podría aportar al Alavés. El año pasado jugó 31 partidos en los que anotó un gol y dio dos asistencias. En la presentación de Fuchs, Sergio Fernández anunció que su intención era tener cinco centrocampistas de perfiles diferentes con los que poder ir rotando según las necesidades, y Pons es un tipo de futbolista con el que no cuenta el club actualmente.