VITORIa - A falta de cuatro jornadas para terminar LaLiga al Deportivo Alavés le queda una última bala para no descolgarse en demasía de las opciones, aún reales, de poder obtener un billete para entrar en Europa. Los albiazules ocupan la octava plaza con 46 puntos y este sábado se la jugarán en San Mamés a la 13.00 horas ante el Athletic, séptimo con 49, que desde la llegada de Gaizka Garitano al banquillo rojiblanco, a comienzos de diciembre, no conoce la derrota en casa. En caso de no lograr imponerse a los vizcaínos, en el derbi vasco, los alaveses esperarán que el Espanyol y Betis, noveno y décimo con 43 puntos, empaten. Los catalanes y sevillanos se enfrentan entre sí el lunes 29 de abril a las 21.00 horas en el Benito Villamarín. En caso de que cualquiera de los dos equipos gane el encuentro y el Alavés pierda ante el Athletic, los vitorianos descenderían a la novena posición automáticamente. La pérdida de posición se debe a que el conjunto albiazul ha empatado (0-0 y 1-1) los partidos jugados ante el Betis mientras que ante el Espanyol ha ganado uno y perdido otro, ambos con el mismo resultado de 2 a 1. Por tanto, el golaverage determinará la posición del Glorioso en esta jornada que resulta vital para los intereses de un Alavés que no quiere cerrar de un portazo las opciones de poder estar el año que viene en Europa.

Hace apenas seis jornadas parecía muy complicado que el conjunto babazorro no pudiera lograr finalizar la temporada en posiciones europeas y demostrar que pese al bajo presupuesto del cuadro albiazul trabajando se pueden conseguir grandes cosas. Por desgracia el paso de las jornadas han hecho que tanto en lo deportivo como en lo extradeportivo la situación se haya ennegrecido. En el plano estrictamente deportivo habría que remontarse a la jornada 28 en el Alcoraz para recordar la última victoria de los gasteiztarras en la competición doméstica. Se impusieron al Huesca por 1-3 con goles de Guidetti y Calleri por partida doble. Desde entonces los albiazules no han sumado más que derrotas ante Atlético de Madrid (0-4), Sevilla (2-0), Espanyol (2-1) y Barcelona (0-2), y dos empates en Mendizorroza contra el Leganés (1-1) y el Valladolid (2-2). De esta manera, en las últimas seis jornadas han sumado tan solo 2 puntos de los 18 posibles en LaLiga. Luchando por la misma plaza europea se encuentran el Athletic, Espanyol y el Betis. Los rojiblancos, por su parte, en las últimas seis jornadas han sumado 12 puntos frente a los 9 de los periquitos y 4 de los verdiblancos.

problemas externos Por otro lado está el plano extradeportivo que ocupa la situación de Iraultza 1921 y la no continuidad del técnico Abelardo Fernández para la próxima temporada. Ambas situaciones no han hecho más que girar el foco deportivo para centrarlo en el banquillo y en las gradas. La 21 se ha visto obligada a cesar su actividad debido a las continúas sanciones por el mero hecho de hacer lo único que saben hacer, animar hasta la extenuación en los buenos y en los malos momentos al Alavés. Pese a todo el club no se ha posicionado públicamente ante la situación que vive Iraultza como sí lo ha hecho Osasuna con su grada de animación, Indar Gorri, que se encuentra en la misma situación que la afición albiazul. En cambio, el capitán del Alavés Manu García sí dio su opinión al respecto y animó a que de una vez por todas se solucione la situación para que la 21 pueda seguir jornada tras jornada llenando de color las gradas de Mendizorroza, con sus tifos, y cánticos así como todos los estadios donde les dejen ejercer su derecho a animar libremente.

A mediados de abril, tomaron la decisión de cesar su actividad y apartarse de manera pacífica con el único objetivo de solucionar su situación. No querían entorpecer la buena temporada del Alavés que por entonces tenía más opciones que en la actualidad de obtener el billete europeo la próxima campaña. Desde entonces Mendizorroza no es lo mismo y la afición gasteiztarra creía que ésta sería la última mala noticia de una temporada que hace pocos meses se catalogaba de histórica.

El último sobresalto ha sido la marcha de Abelardo Fernández, que no continuará la próxima temporada en Vitoria tras no aceptar la oferta de renovación del club. El martes, Josean Querejeta confirmó que el técnico asturiano no seguiría tras pedir más del doble de dinero para prolongar su etapa. Pese a las declaraciones del máximo dirigente del Alavés, el Pitu aseguró estar bien y con fuerzas de finalizar la temporada lo mejor posible. “Mi relación con Querejeta es y será siempre muy buena”, indicó el miércoles tras la derrota (0-2) ante el Barcelona en Mendizorroza.

Bajo este clima de tensión llega el Alavés al derbi de este sábado en San Mamés ante el Athletic. El duelo llega en el puente de San Prudencio y previo a las elecciones generales del domingo. En la plantilla, por su parte, esperan que los aspectos deportivos y extradeportivos no afecten y puedan luchar por esta última bala para poder entrar en Europa.

últimas cuatro jornadas La situación extradeportiva no ayuda para nada al Deportivo Alavés para afrontar las últimas cuatro jornadas del torneo. El objetivo en estos momentos es no descolgarse de las opciones europeas y dar una alegría final a una afición que no reconoce a su equipo. Al Deportivo Alavés le quedan dos derbis, ante el Athletic en San Mamés y la Real Sociedad en Mendizorroza, mientras que tendrá que visitar Mestalla para medirse a un Valencia que en la jornada 37 estará peleando por una plaza de Champions League. Cerrará la temporada en casa ante un probablemente necesitado de puntos Girona, que visto lo visto se jugará en Vitoria la permanencia.

El Athletic quizá sea el rival que más sencillo pueda tener el final de curso. Por un lado, está el buen momento que atraviesa desde la llegada de Garitano y por el otro el fortín en que se ha convertido San Mamés. El sábado recibirá al Alavés y cerrará la liga contra el Valladolid, Celta y Sevilla. El Espanyol se medirá al Betis, Atlético de Madrid, Leganés y Real Sociedad, mientras que el Betis lo hará con el Espanyol, Eibar, Huesca y Real Madrid.