vitoria - Hasta el pasado sábado, únicamente había conseguido profanar el templo de Mendizorroza en la presente temporada. El Rayo Vallecano fue el primero en llevarse los tres puntos en liza y otro conjunto madrileño, en este caso el Atlético, hizo lo propio este fin de semana. Un balance, el de dos derrotas como local tras la disputa de las 29 primeras jornadas de Liga, que debe considerarse más que notable sin ninguna duda pero que muestra un claro cambio de tendencia en la escuadra de Abelardo.

Porque, hasta el ecuador de la competición de la regularidad, el cuadro albiazul cimentó su gran rendimiento en su espectacular rendimiento en el Paseo de Cervantes. Sin embargo, con el inicio de la segunda vuelta, esta fortaleza ha comenzado a presentar algunas grietas que han provocado que mermara considerablemente la cosecha de puntos que ha ido a parar al casillero del Glorioso. Una reducción que, no obstante, se ha visto compensada a través de otra vía.

Porque la realidad es que, en estos momentos, el Deportivo Alavés presenta mayor peligro como visitante que cuando actúa al calor de su público. Así lo reflejan las siempre frías estadísticas. Unos datos que muestran que en las diez contiendas de la segunda vuelta que se han disputado hasta el momento el conjunto vitoriano ha sacado mejores notas lejos de su propio feudo. En Mendizorroza ha recibido las visitas de Rayo Vallecano (0-1), Levante (2-0), Celta (0-0), Eibar (1-1) y Atlético de Madrid (0-4), con un balance de cinco puntos logrados de los quince que podía haber obtenido en el caso de haber firmado un pleno.

Por lo que respecta a sus comparecencias lejos del coliseo del Paseo de Cervantes, se ha enfrentado a Getafe (4-0), Real Madrid (3-0), Betis (1-1), Villarreal (1-2) y Huesca (1-3). De este modo, pese a que comenzó esta particular serie encajando sendas goleadas, ha logrado enderezar su trayectoria de manera brillante y acumula ya dos meses sin perder como visitante. Un periodo en el que ha sumado siete valiosos puntos que le han ayudado a conservar su posición de privilegio en la tabla.

Esta tendencia positiva se convierte precisamente en estos momentos en el mejor aliado albiazul, puesto que le permite afrontar con confianza la siempre complicada visita al Sevilla de este jueves. El combinado gasteiztarra ya ha ofrecido sobradas muestras de que sabe cómo extraer petróleo de sus desplazamientos y tratará por todos los medios de repetir el guion en un duelo que puede ser clave para su futuro.