vitoria - El partido de este sábado en Mendizorroza ante el Alavés ha quedado casi en un segundo plano para el Real Betis, que todavía no ha puesto fin a su voracidad en el capítulo de fichajes en el actual mercado estival y aspira a reforzarse con un centrocampista que, eso sí, difícilmente llegará a tiempo de medirse al conjunto albiazul. El club andaluz ha pedido al Barcelona la cesión de Rafinha Alcántara, un jugador cuyos minutos pueden llegar con cuentagotas a las órdenes de Ernesto Valverde y, por tanto, quiere emigrar de la Ciudad Condal. El serio problema para el Betis en este instante es que el Barça exige un traspaso cercano a los 35 millones de euros y aspira a recibir una oferta convincente por una doble cuestión económica y deportiva.
Quien está a punto de abandonar el Villamarín en calidad de cedido es el defensa rumano Alin Tosca con destino al PAOK de Salónica. El acuerdo entre las partes es total y esperan que éste se oficialice en las próximas horas, cuando el futbolista viaje a Grecia para someterse al preceptivo examen médico. Esta sería una cesión con una opción de la compra de su ficha que el PAOK podría ejercitar el próximo junio sobre Tosca, uno de los tres descartes que se pretenden en la plantilla de Quique Setién, junto a Juanjo Narváez y Álex Alegría. - DNA
