al Alavés le tocó otro año más comenzar la Liga fuera de casa, en el Camp Nou, enfrentándose al vigente campeón, el Barcelona. Verse las caras con el conjunto de Valverde, con pasado albiazul de su etapa como jugador y más en su campo, nunca es tarea fácil. Y más aún si sabes que has sido el último equipo de la Liga capaz de ganarle, hace ya 23 meses, con Pellegrino como entrenador.
Ha pasado mucho tiempo desde entonces, finales de Copa del Rey y cambios de entrenador incluido. Este año, a diferencia de otros, los de Pitu Abelardo decidieron viajar en el día. Salieron por la mañana temprano, a las 10.00 horas, desde Foronda dirección al aeropuerto de El Prat (Barcelona). Una vez allí se dirigieron al Hotel NH Collection Tower, donde quedó alojada la expedición albiazul. Allí descansaron toda la tarde hasta que se dirigieron en autobús al campo culé, con los que se enfrentarían a las 22.15 horas. Al estar enmarcado el choque dentro del periodo estival, se vieron decenas de aficionados gasteiztarras en las gradas que dieron esa nota de color azul al blaugrana habitual que baña las gradas del todopoderoso Barça. Para esta importante cita, los babazorros no jugaron con su habitual uniforme albiazul, sino que salieron con la tercera equipación de este año de colores blanco, verde y rojo.
visita de munir El ex del Alavés, descartado el viernes por Abelardo para la jornada del bautismo liguero y que en principio permanecerá esta campaña en la Ciudad Condal ante el deseo del club catalán de renovar su contrato, visitó a los que fueron sus compañeros en el hotel en el que estos descansaban. En la foto -compartida mediante una historia de Instagram en el perfil de Ibai Gómez- se vio al hispano-marroquí junto a Burgui, Pachecho, Manu García, Wakaso y el propio Ibai dejando patente la buena relación que mantiene con los jugadores de la actual primera plantilla del Alavés. También aprovechó la ocasión para saludar a su extécnico Abelardo, con el que el pasado año firmó una gran campaña anotando diez goles y seis asistencias.