Vitoria - Como estaba previsto desde que se despidió de Vitoria hace ya unas semanas, las noticias entorno al futuro de Munir El Haddadi continúan sucediéndose a cada día que pasa, y eso que aún resta más de un mes para que los equipos den comienzo a sus respectivas pretemporadas. El último capítulo del que está llamado a ser uno de los culebrones del verano en el entorno del Deportivo Alavés lo ha firmado su club de origen, el Barça, que en una reunión mantenida el pasado martes con el entorno del jugador, ha arrojado algo de luz sobre el futuro del delantero. Según la información que ayer publicó Sport, la hoja de ruta fijada por la entidad catalana en este asunto es simple y ofrece una doble variante: o una renovación del contrato de Munir con el club -su contrato expira el 30 de junio de 2019- o un traspaso en estos momentos para evitar que el delantero, revalorizado ahora mismo tras su gran temporada en Vitoria, se marche el año que viene sin dejar ningún ingreso en las arcas blaugranas. El precio de salida fijado por el Barça para dejar libre al punta de Galapagar sería de entre 15-20 millones de euros, una cantidad considerable que, sin embargo, no ha impedido que clubes como el Betis en LaLiga u otros en la Premier League se hayan interesado en las últimas semanas por el jugador, si bien ninguno de ellos ha enviado una oferta concreta al Barça.
sin hueco en el barça Aunque el jugador es consciente de las escasas oportunidades que tendrá el año que viene en el plantel de Ernesto Valverde, su deseo pasa, al menos, por poder realizar la pretemporada con el conjunto culé para tratar de demostrar al técnico vasco que sí puede tener un hueco al lado de los Messi, Suárez y compañía. Sin embargo, como quiera que las intenciones de la entidad blaugrana con este jugador parecen claras, su intención es cerrar cuanto antes su salida del club -a poder ser antes de que dé comienzo el trabajo el próximo 16 de julio-, hacer caja y desear la mayor de las suertes al punta madrileño.
Será entonces cuando el Deportivo Alavés pueda entrar en escena para, primero, tratar de convencer al jugador de que regrese a Vitoria, donde la pasada temporada jugó como cedido para explotar definitivamente con 14 goles en 36 partidos, y, en segundo lugar, buscar la manera de hacer frente a la que sería, probablemente, la mayor inversión de su historia. ¿Estaría dispuesto el club a pagar 15 millones de euros por este jugador? Si fuera así -algo con pocas probabilidades de éxito dada la particular filosofía económica que impera en el Grupo Baskonia-Alavés-, haría bien en trasladárselo cuanto antes a los agentes del jugador, toda vez que será en las próximas semanas cuando este entorno y el Barça vuelvan a reunirse en la capital condal para valorar las ofertas que en este tiempo se hayan podido producir por el jugador.