Estaba avisado el Alavés de lo que podía sucederle y ocurrió. En el guión blanco tocaba arrebato tras las últimas goleadas ante el Betis y el Leganés y la película del Bernabéu se desarrolló sin sobresaltos. Cuatro goles de Ronaldo (2), Bale y Benzema y ninguno del Alavés, que llevaba los último partidos consecutivos viendo puerta, fueron el resumen de un escarmiento que entraba dentro de la lógica pero que bien pudo haber terminado peor de no aparecer de nuevo las manos de Fernando Pacheco, que ayer regresó a la que durante muchas temporadas fue su casa. Un rejón de aúpa en cualquier caso para la plantilla albiazul que, sin embargo, apenas quedó tocada tras el partido ni mostró signo de debilidad ninguna. Más al contrario. Porque las filas ayer estaban igual de prietas que de costumbre y la moral, intacta, lo que representa sin duda la mejor noticia de cara a la próxima final de liga ante el Levante, este jueves a las 21.30 horas en Mendizorroza. Un duelo a cara de perro otra vez ante un rival directo en la lucha por la permanencia al que en el partido de ida, en el debut de Gianni De Biasi en el banquillo, ya logró la escuadra albiazul hacerle doblar la rodilla en Valencia con dos goles de Munir y Medrán. Un partido de “nuestra liga”, como lo calificó ayer Víctor Laguardia, para el que el Alavés recuperará precisamente a su mejor artillero, Munir El Haddadi, cuyos goles se echaron ayer demasiado en falta en el duelo del Bernabéu.
abelardo y zidane La derrota de ayer también confirmó que, de momento, Zidane le sigue teniendo tomada la medida a su colega Abelardo. Si ya en la época de jugador le ganó el francés en las dos veces en las que ambos se enfrentaron, como técnico suma Zizou tres de tres ante el asturiano, que ayer no tuvo reparos a la hora de valorar los graves incidentes del pasado jueves en los aledaños de San Mamés entre grupos ultras del Athletic y el Spartak de Moscú. “Me imagino que la gente estaba prevenida para que no pasara, por eso ahora tiene que haber una sanción ejemplar. Está claro que ir a ver un partido de fútbol es un espectáculo y hay que ir a divertirse. Hay que erradicar a los violentos y no sé cómo hacerlo, pero tiene que haber una sanción ejemplar”, señaló Abelardo.