Vitoria - Los ecos de la derrota en Barcelona y la decisiva actuación que tuvo Iglesias Villanueva en ese resultado siguen coleando todavía. Uno de los protagonistas al final de dicho encuentro en el Camp Nou fue un Víctor Laguardia que ayer se puso de nuevo ante los micrófonos para perseverar en la necesidad de que todos los clubes sean tratados por igual. De nuevo, el central reclamó la ayuda tecnológica para los árbitros y, en este sentido, lanzó una advertencia de cara al futuro: “Sería muy importante para los árbitros y, en mi opinión, perjudicaría mucho a los equipos grandes”.
Si se ha pasado o no el enfado ya da igual. Acabas el partido caliente, pero el punto o los tres puntos que volaron ya no vuelven. El calentón se puede pasar, pero los puntos se han perdido. En ningún momento dije que el árbitro viese la mano o el fuera de juego porque es evidente que no lo ve y que tiene dudas. Ante esa duda, es normal que lo que pasó le influya. Le influyó a él y lo hubiera hecho con cualquier otra persona. Es un ser humano, es mucha presión la que generan equipos como Barcelona y Real Madrid y es normal que tenga tantas dudas. Hay que entender que para ellos el Alavés es un club más pequeño que el Barça, pero nosotros representamos a un club muy grande, a una afición muy grande y a una ciudad muy grande y era un punto o tres puntos que nos daban mucha vida cuando nos estamos jugando muchas cosas. No es un calentón, es la realidad. Falló a favor del Barcelona; otro día que falle para el Alavés. Llevamos dos partidos que nos cuestan puntos”, señaló el defensa zaragozano.
Laguardia es un jugador que siempre se lleva los brazos a la espalda cuando el rival va a disparar. Un gesto que perjudica sus opciones defensivas, pero que evita complicaciones. Con la normativa en la mano, totalmente inútil. “Desde pequeño te enseñan que esas jugadas se defienden así, sabiendo que pierdes equilibrio llevándote las manos atrás. Es mucho más fácil defender como lo hizo Umtiti. Las reglas las cambian año tras años. Vino Bikandi Garrido a explicárnoslo y la regla es la que es, pero entonces el día del Leganés... Y encima tampoco fue mano, pero si hubiese sido, tampoco. Sabemos cómo son las reglas, pero hay que aplicarlas para todos por igual y en todos los casos por igual. Yo creo que la ayuda tecnológica sería muy importante para los árbitros y, en mi opinión, perjudicaría mucho a los equipos grandes”, advirtió.
Tras estas explicaciones, el maño quiso centrarse con lo que viene por delante: “Contra el Celta tenemos una final porque después vienen salidas muy difícil y hay que seguir siendo fuertes en casa porque la salvación pasa por Mendizorroza. Tenemos algo que muchos envidian que es nuestra afición. En las buenas animan, como todas, pero lo importantes que están ahí cuando no son tan buenas”. - DNA