Vitoria - Que la confianza es, prácticamente, todo en la vida de un delantero centro es una suerte de ley no escrita que, entre otros, conoce de sobra Christian Santos. El delantero venezolano, lastrado durante meses por los diferentes entrenadores que han ido pasando por Mendizorroza (Pellegrino, Zubeldía y Cabello) tuvo que rumiar sus frustraciones como 9 puro a la espera de una oportunidad que nunca terminaba por llegar. Tuvieron que ponerse las cosas muy feas y precipitarse los acontecimientos para que el punta atisbara algo de luz al final del túnel cuando no hace mucho se presentó en Ibaia un tal Gianni De Biasi y le preguntó cómo estaba. A partir de ahí, surgió la chispa y con ella llegó la confianza, que Santos está devolviendo al italiano con lo único que sabe hacer: meter goles. Anotó el primero el pasado 24 de octubre en los 1/16 de final de la Copa ante el Getafe en el Alfonso Pérez (0-1) y volvió a marcar ayer en el decisivo duelo ante el Espanyol (1-0). Un sorprendente tanto que, al margen de dar los tres puntos al Alavés y permitirle romper una pésima dinámica en casa -cinco derrotas en otros tantos partidos-, es de momento el gol más rápido que se ha anotado en la actual temporada en Primera División.
Para encontrar un tanto de semejante rapidez en la historia albiazul habría que remontarse a la temporada 00/01, en la primera jornada, cuando Geli anotó de cabeza en el Insular ante el Las Palmas cuando apenas había transcurrido un minuto. “Estoy muy feliz de haber marcado por primera vez en Mendi. Entramos al partido enchufados y tuve la suerte de marcar... La agarré bien y enseguida supe que iba para dentro. Me recordó a varios goles que ya había marcado en Holanda”, señaló Santos.