Vitoria - Por si todavía existía alguna duda, el alavesismo en su máxima expresión volvió a dejar claro ayer que, por encima de todo, continúa siendo el gran tesoro del Deportivo Alavés. El mayor activo de una entidad casi centenaria que en la tarde-noche de ayer dio el pistoletazo oficial al proyecto de la nueva temporada 2017/18 con una multitudinaria presentación del equipo en la plaza de Los Fueros. Al igual que el pasado año, cerca de 3.000 personas volvieron a arropar al Glorioso en una sonora puesta de largo que tuvo de nuevo a Oihan Vega como maestro de ceremonias. Suyos fueron precisamente los minutos que precedieron a la llegada de los jugadores, al filo de las ocho de la tarde, y que el dj ocupó recordando a través de dos grandes pantallas, y ante una ya entregada afición, algunos de los mejores momentos de la pasada temporada. Por ahí desfilaron por ejemplo los golazos de Theo al Athletic y al Barça en la final del Calderón, el paradón de Pacheco a un penalti de Cristiano Ronaldo en Mendi o la final de la Copa del Rey, entre otros. Precisamente el meta pacense fue el primero en cruzar la pasarela que unía el basckstage con el escenario en medio de una atronadora ovación. Le seguirían minutos después Carlos Vigaray, Rubén Duarte, llegado del Espanyol, el compadre Alexis Ruano, Víctor Laguardia, que se llevó otra de las ovaciones y que continúa metido de lleno en la rehabilitación de su grave lesión, y Guillermo Maripán, que en su puesta de largo ante el alavesismo ondeó la bandera de su país, Chile. Se citaría después a Rubén Sobrino, el internacional serbio Katai, Christian Santos, Romero, Ibai Gómez, el canterano Sergio Llamas, el joven portero llegado desde Valencia, Antonio Sivera, Burgui, Dani Torres y Alfonso Pedraza, otro de los refuerzos de este curso para la banda.
mensaje de manu garcía Mientras tanto, y atentos al desfile desde una grada supletoria, asistía también a la presentación parte de la directiva albiazul con el presidente a la cabeza, Alfonso Fernández de Trocóniz, al que acompañaban Haritz Querejeta, varios empleados del club y el director deportivo, Sergio Fernández. El “hijo predilecto de Gasteiz”, Manu García, fue el siguiente en cruzar entre aplausos la pasarela en medio de la ovación de la noche, con un público entregado a su paisano y con un primer mensaje con cierta carga reivindicativa: “Mi sueño es poder seguir aquí por muchos años”, lanzó el capitán antes de ser someterse después a las cuestiones que le fueron lanzando los aficionados a través de las redes sociales. “Ver Mendizorroza cada semana, la fiesta del fútbol que hemos conseguido entre todos, pasando juntos los malos momentos... Eso nos tiene que enseñar el camino, así que hagamos de esta temporada otra campaña irrepetible”, señaló el vitoriano, que a continuación frenó con fina diplomacia los anhelos de competir en Europa de buena parte de la afición. “¿Europa? Soñar siempre es bueno pero debemos tener los pies en la tierra siempre. Además de ser unos recién llegados a Primera somos pequeños que compiten contra grandes. Lo del años pasado es un buen ejemplo de lo que este club tiene que hacer, y lo que tenemos que hacer es competir cada semana, esa es nuestra obligación. Con humildad, respeto, esfuerzo y trabajo. Tenemos que aspirar cada fin de semana a eso”, abundó el capitán antes de rendirse ante el empuje de los miles de aficionados presentes, a los que arengó a seguir disfrutando otro año más del Glorioso en la mejor liga del mundo. A continuación subieron al escenario compañeros como Héctor Hernández, Enzo Zidane o Wakaso, y también el nuevo cuerpo técnico (Maxi Cuberas, Javi Cabello, Lucas Vivas, Nenad Njaradi y Juan San Román) que comanda Luis Zubeldía, el máximo responsable de mantener viva la llama de la ilusión que el año pasado encendió un compatriota suyo como Mauricio Pellegrino.