Vitoria - Si la cara buena del Alavés la representan en estos momentos jugadores como Romero o Katai, cuyos dos últimos goles ante Valencia y Sevilla han supuesto cuatro puntos, la cara amarga tiene nombre y apellidos y se llama Deyverson, delantero de referencia para Pellegrino que acumula a estas alturas casi tres meses sin marcar un gol. Y no precisamente por falta de oportunidades -ante el Sevilla dispuso de dos ocasiones clarísimas para un delantero centro- sino por una peligrosa negación a la hora de enchufar la pelota que está sumiendo al carioca en una peligrosa espiral de desconfianza. Porque por más que el técnico argentino trate de restar importancia a esta sequía, la realidad es tozuda. Y es que el espigado punta no marca su sexto gol desde la ya lejana jornada 16ª, en diciembre, cuando anotó en Mendi el tanto de la victoria ante el Betis. Desde entonces, y a pesar de la continuas titularidades que le brinda Pellegrino, agua. 850 minutos sin ver puerta entre Liga y Copa. - A. G.
