vitoria - Algo que el madrileño Óscar Téllez confía en que haga la actual escuadra albiazul.
¿Qué recuerdos guarda de las dos semifinales que disputó?
-Antes de empezar la eliminatoria estábamos con la idea de hacer algo grande en la Copa. Porque una vez que te metes en semifinales es lo que quieres. En mi caso fueran contra el Mallorca y el Zaragoza y evidentemente en ninguna de las dos nos sentíamos inferiores. Quizás un poquito más en la primera pero como veníamos de eliminar a cuatro primeras, entre ellos el Real Madrid, nos hicimos fuertes. Cuando llegas a una situación así te encuentras con seguridad y el equipo ahora creo que está capacitado para superar lo que hicimos nosotros. Y espero que lo haga porque yo quiero al Alavés, soy del Alavés y confío en esta plantilla. Está dando muchas garantías para, cuando menos, confiar en ellos por el trabajo que realizan cada domingo.
¿Se parece este Alavés al suyo?
-Es verdad que las plantillas cuestan muchísimo dinero y que el talento se paga pero hay otras con menos poder económico e igual prima más el esfuerzo. Y si tuviéramos que hacer la clasificación por el esfuerzo indiscutiblemente el Alavés estaría en el primer lugar. Veo partidos suyos y es muy gratificante ver cómo trabajan y los solidarios que son en todos los partidos. De hecho yo he propuesto en escuelas de por aquí que enseñen a los niños partidos de este tipo de equipos. Porque el fútbol real es este, el del trabajo, la solidaridad y el esfuerzo. A mi me gusta mucho ver equipos así y que mi equipo esté dentro de ese grupo me produce un enorme placer.
¿Cómo se prepara un partido así?
-No hace falta ya preparar mucho al jugador porque hay ciertos partidos que con la transcendencia que tienen no necesitan mucha motivación adicional. Es sencillo para el entrenador. En este caso para el Alavés los jugadores no van a necesitar una motivación extra porque saben la repercusión que tiene y que el objetivo está en los noventa minutos.
¿En una cita como esta qué es más importante lo anímico o lo futbolístico?
-Las dos cosas, una no prioriza sobre la otra. Lo que ocurre es que cada equipo tiene su filosofía de juego.
¿La quinta semifinal puede ser la definitiva?
-No sé si puede ser pero yo lo deseo. Soy de los que piensa que lo que yo haya hecho en el pasado con el Alavés -que hicimos cosas muy grandes- ojalá puedan superarlo las generaciones próximas y si es ésta mejor. En este caso que puedan llegar a la final de la Copa. Me encantaría. Además yo creo que sería bueno para el fútbol también, que no siempre estén los mismos.