Hay trenes que solo pasan una vez en la vida, pero aquel en el que hace nueve años viajó Alexandre Pato (Brasil, 1989) rumbo al Milán ha dado una vuelta de más para volver a recoger al talentoso delantero brasileño, reclutado por el Villarreal el pasado verano a cambio de tres millones de euros y un contrato lleno de esperanza para las próximos cuatro temporadas. Ha sido la entidad castellonense, acostumbrada a sacar el máximo rendimiento a futbolistas en sus horas más bajas, el club que ha decidido apostar por el resurgir de un jugador nacido para marcar las diferencias sobre el verde. Así se definía en 2006, con apenas 17 años de edad, a un joven atacante que despuntaba en Brasil y que no tardó en llamar la atención de los grandes clubes europeos.
Fue solo un año después, tras brillar con luz propia en la consecución del Mundial de Clubes como jugador del Porto Alegre, cuando el Milan apostó fuerte por él. No dudó el magnate Silvio Berlusconi en lanzarse al mercado para poner sobre la mesa 24 millones de euros por una joven promesa a la que ya se comparaba con otras grandes estrellas brasileñas. Su sonado fichaje por el club italiano se convirtió en el más caro de la historia con un menor de edad de por medio, pues Pato se encontraba al borde de los 18 años. Los cumplió el brasileño al calor de San Siro, donde rindió acorde a las expectativas generadas hasta que las lesiones frenaron en seco su enorme proyección.
En su estreno con el Milan, en solo media temporada, el carioca marcó nueve goles en veinte partidos, alcanzando las dieciocho dianas en un total de 42 encuentros en la temporada 2008-09. Todo eran elogios y alabanzas para Pato, que en diciembre de 2009 fue nombrado mejor jugador de Europa menor de 21 años. Esa campaña, la 2009-10, sin embargo, fue el principio de la inesperada y tempranera decadencia del brasileño, que empezó a sufrir innumerables lesiones musculares. Aun así, tuvo tiempo para marcar catorce goles en 30 partidos, disputando 36 encuentros oficiales y viendo portería en 19 ocasiones en la campaña 2010-11, la última en la que dejó su sello pese a los numerosos percances físicos padecidos a lo largo de la misma.
Tras participar en solo 25 partidos durante sus dos últimas temporadas como futbolista del Milan, Pato decidió emprender el viaje de vuelta a Brasil, donde fue recibido como un auténtico ídolo dada su destacada condición de internacional. Fichó en enero de 2013 por el Corinthians, que desembolsó 15 millones de euros por sus servicios. Allí, en su país, consiguió recuperar parte del terreno perdido exhibiendo un nivel creciente. El Sao Paulo, entre 2014 y 2015, disfrutó de una versión esperanzadora de Pato, que aceptó el reto de jugar como cedido en el Chelsea durante la segunda mitad de la pasada temporada. Formalizó así su esperado regreso a Europa, pero el brasileño apenas tuvo opciones de jugar. Guus Hiddink solo le alineó en dos partidos y tuvo que volver a Brasil. Pero lo hizo convencido de que aún le quedaba una nueva bala en la recámara.
A buen nivel El Villarreal, convencido de poder exprimir su talento, llamó a su puerta en julio y Pato no se lo pensó. Aceptó el reto y se puso manos a la obra en pretemporada con el objetivo de relanzar su carrera. Con 27 años, aún le queda fútbol en las piernas y es consciente de ello el habilidoso delantero brasileño, que arrancó la presente temporada como titular en la delantera amarilla.
Sus primeras actuaciones encandilaron a la afición castellonense, que ya ha podido celebrar cuatro goles de Pato en los catorce partidos que ha disputado. Su punto negro, no obstante, vuelven a ser las lesiones. Sufrió una ante el Sevilla en el cierre de agosto y ser perdió dos jornadas de liga por causa de unas paperas. La presencia de Bakambu y las grandes prestaciones de Sansone también suponen amenazas para los minutos de juego del brasileño.
Necesitado de minutos para no perder el paso en una aventura de gran relevancia para sus renovadas aspiraciones, Pato aspira a dejar su sello en los minutos de juego que le conceda Fran Escribá en el duelo contra el Deportivo Alavés, consciente de la importancia de mantener enchufado a un futbolista decidido a no dejar pasar un nuevo tren en su carrera.
Fecha de nacimiento: 2-9-1989, Paraná (Brasil).
Trayectoria: Porto Alegre (2006-07), Milan (2007-13), Corinthians (2013-14), Sao Paulo (2014-15), Chelsea (2016) y Villarreal (2016-?).
Palmarés: Mundial de Clubes (2006), Recopa Sudamericana (2007 y 2013), Confederaciones (2009), Serie A y Supercopa italiana (2011) y Paulista (2013).
