Vitoria - El miércoles era día festivo para el Deportivo Alavés con la inauguración de su quinta peña oficial, Dulantzi Albiazul, lo que supone que el sentimiento alavesista se sigue extendiendo más allá de la capital alavesa, tal y como se encargó de refrendar el presidente, Alfonso Fernández de Trocóniz. “Estamos encantados con la quinta peña, que encima es de fuera de Vitoria y eso habla muy bien de la proyección del equipo. Entendemos que el Deportivo Alavés no es solo el equipo de Vitoria, sino en el de toda Álava y el de todos los alavesistas, allá donde estén”, aseguró durante el acto.

Eso sí, el estreno de la quinta peña entronca con unos momentos críticos para la afición alavesista por los últimos acontecimientos acaecidos. El más grave de ellos, la agresión que varios seguidores albiazules sufrieron a la salida del estadio El Sadar, cuando se produjo una carga de la Policía Nacional que se sigue analizando para buscar responsables.

“Se está analizando esa situación y hablando con Osasuna para ver, a través de su coordinador de seguridad, cómo están las actas del partido. Es una cuestión compleja, evidentemente, porque hay una versión de allí y otra versión de nuestra afición. Se está analizando y a la espera de ver las actas de seguridad de ese partido”, aseguró Fernández de Trocóniz.

Lo único innegable es que varios seguidores albiazules fueron golpeados y sufrieron diversas lesiones por dicha carga policial. Y como protesta a la ausencia de respuesta por parte de organismos oficiales y clubes, Iraultza 1921 decidió en asamblea el pasado sábado permanecer sin animar durante los doce primeros minutos del partido del próximo domingo contra el Espanyol. “Es una decisión que han tomado y no podemos hacer otra cosa que respetarla. A nosotros nos da pena que se pierda ambiente, pero hay que respetar la decisión porque son muy libres de tomarla”, zanjó el presidente. - DNA