VITORIA ? Con la consecución del gran objetivo del ascenso asegurado al fin, José Bordalás pudo dar rienda suelta a las emociones contenidas durante nueve meses. No dudó el alicantino en atribuir todo el mérito a los “jugadores y la afición que se lo han merecido por el trabajo de unos y el apoyo de otros a lo largo de todo el año”, explicó en sus primeras palabras todavía sobre el césped de Mendizorrotza. Se refirió después a la “fuerza, energía y poder mental” de toda la plantilla como la llave que ha guiado a sus pupilos por la complicada categoría de la Liga Adelante con muchos conjuntos que, de salida, arrancan con el objetivo del ascenso. “Siempre hemos creído”, recalcó para dar más fuerza a la gesta del ascenso. Siguió repartiendo alabanzas hacia sus jugadores sobre todo por la “honradez y honestidad del equipo durante todas las jornadas de la competición” que han logrado rematar con el retorno tras once años a la Primera División.

La plantilla albiazul ha sido a lo largo de este curso una mezcla de veteranía y juventud a la que el preparador alicantino ha tenido que saber mezclar y dirigir para remar todos en conjunto hacia el salto de categoría y el retorno a la elite. “El vestuario ha sido magnífico y hay que felicitar al grupo por su compañerismo”, glosó Bordalás. Hay integrantes veteranos que sobrepasan los treinta años de edad y tenían una de sus últimas ocasiones en su andadura profesional de lograr el ascenso a la Liga BBVA. Hombres como Pelegrín, Mora o Juli han sido algunos de sus peones de plena confianza y que le han acompañado en diferentes equipos en las últimas temporadas. “Era el tren que algunos tenían que coger y que igual no se les iba a presentar una oportunidad similar y debían aprovecharla”, argumentó el preparador ilicitano, satisfecho y sonriente por el logro consumado. “Me alegro por ellos”, desveló como gran referente de la “honestidad y honradez” que han demostrado sus jugadores a lo largo de las 41 jornadas hasta rematar el ascenso.

A lo largo de los diez meses de exigente competición con el desarrollo de las jornadas empezó a creerse el vestuario la seria posibilidad de ascenso y “desde hace semanas” se marcaron la meta de estar en la temporada 2016-17 en la denominada Liga de las Estrellas. Este hecho les mantuvo “mentalmente fuertes” con el discurrir de las jornadas y aparecieron algunas opiniones y “gente que no creía” y ponía “cosas en duda” en alusión al juego en ocasiones al límite del reglamento y con una sucesión de faltas y juego directo y poco vistoso.

recuerdo a la familia José Bordalás añade a su carrera profesional un ascenso a la Primera División como único reto que le quedaba por conseguir desde que se iniciara en los banquillos hace 17 temporadas. Estuvo a las puertas de lograrlo con el Elche en la temporada 2010-11, pero los aciagos minutos finales de una eliminatoria ante el Granada le privaron de llegar a lo más alto. El técnico albiazul no quiso recordar esas “experiencias” que ha vivido a lo largo de todos estos años y se refirió a la vertiente positiva que pudo sacar de todo aquello para seguir trabajando y mejorando como profesional. Y tampoco quiso ahondar ayer sobre su futuro en el club, que ahora mismo está en el aire: “Esperemos que sí pueda continuar en el futuro”, zanjó antes de dirigir su mirada a la grada, en la que se acordó de su gente más próxima, su mujer, su hija y su hijo, ayer todos presentes en el partido. l