vitoria - La temporada que está firmando el Deportivo Alavés hasta el momento no puede recibir otro calificativo que no sea el de notable. Para alcanzar el sobresaliente, únicamente le falta culminar todo el excelente trabajo previo con el premio del ascenso. Una guinda al pastel que se está complicando en las últimas semanas como consecuencia de las dificultades que está encontrando la escuadra de José Bordalás para conseguir victorias. Pese a la evidente ralentización de su ritmo de cosecha de puntos, el plantel vitoriano se mantiene en la segunda posición de la tabla o, lo que es lo mismo y casi más importante, con el billete de acceso directo a la Primera División en la mano. Por lo tanto, puede afrontar las seis últimas y definitivas jornadas del campeonato con la tranquilidad de saber que parte desde un lugar de privilegio que le permite disponer de un mínimo margen de confianza.

Ahora bien, ni mucho menos puede relajarse pensando que el objetivo ya está cumplido puesto que en absoluto es así. De hecho, los últimos resultados que se han producido en las semanas recientes han provocado que un nuevo y en cierta medida inesperado peligro aceche al conjunto del Paseo de Cervantes y le obligue a emplearse al límite de sus posibilidade si desea evitar ser víctima de un enorme varapalo.

Porque probablemente cualquier aficionado de la Segunda División habría dado por seguro hasta hace unas semanas que El Glorioso tenía garantizado, como mínimo, un puesto en el play off de ascenso. La escuadra albiazul era para muchos la gran favorita para liderar la clasificación al final de la campaña y su entonces aparentemente inquebrantable solidez le permitía no transmitir dudas. Unas sensaciones que corroboraba la tabla clasificatoria, en la que disponía de ventajas que prácticamente nunca bajaban de los siete puntos respecto al equipo que marcaba la frontera de los clasificados para las eliminatorias de acceso a Primera.

Sin embargo, la situación ha cambiado de manera notable ahora. Tanto en lo que respecta al propio Alavés como en lo que afecta a sus perseguidores. Los resultados que se han ido produciendo a medida que se acerca el tramo decisivo de la Liga han hecho que la clasificación se comprima de manera espectacular y, de esta manera, aunque el cuadro de Bordalás continúa disfrutando de una posición de privilegio su renta se ha reducido considerablemente. Además, varios equipos más que parecían descartados han terminado por unirse a la fiesta. Una circunstancia que aumenta el número de candidatos a ocupar esas plazas de honor y también la amenaza para El Glorioso. En consecuencia, el equipo vitoriano tendrá que hacer en las seis jornadas que restan una doble defensa. Como primer objetivo de su puesto de ascenso directo y, como mal menor, de la plaza para disputar los play off, algo que parecía casi asegurado semanas atrás y que en estos momentos todavía está en el aire.

Porque los 59 puntos que figuran en el casillero albiazul le conceden ahora solo cuatro de ventaja respecto al 7º clasificado (el Girona, con 55), cinco con el 8º (el Elche con 54) y siete al 9º (el Alcorcón, con 52, que recibirá al Alavés dentro de dos jornadas). Todos ellos, aspiran claramente a colarse entre los seis primeros, un propósito que los de Bordalás deben impedir que logren a costa suyo.

leganés 63

alavés 59

nàstic 57

oviedo 56

zaragoza 56

osasuna 56

girona 55

elche 54

alcorcón 52

córdoba 52

lugo 51

tenerife 50