Elche - La ejecución de las acciones de estrategia son la principal fuente de goles de casi todos los clubes y el Deportivo Alavés se ha encontrado con un protagonista completamente inesperado en el lanzamiento de las faltas directas. Y es que Raúl García se reafirmó ayer como un especialista con todas las letras al conseguir su segundo tanto de la temporada ejecutando a la perfección esta especialidad que puede parecer muy sencilla, pero que es extraordinariamente compleja.
El lateral izquierdo gallego volvió a demostrar en el estadio Martínez Valero que le tiene cogido el pulso a los disparos desde la frontal del área. Ya sacó a relucir un golpeo fino y ajustado en la victoria en Almería, ya que entonces abrió el marcador con una falta directa. Y ayer, ante el Elche, calcó ese disparo que realizó anteriormente en el estadio de los Juegos Mediterráneos. Incluso en versión mejorada. Y es que si entonces su balón, pasado por encima de la barrera, no fue excesivamente escorado y se encontró con la pasiva actitud de Casto, ayer Javi Jiménez no pudo hacer otra cosa que ver entrar el balón por su escuadra.
Detrás de goles como el de ayer hay mucho trabajo en los entrenamientos, ya que al menos un par de jornadas por semana un buen grupo de jugadores albiazules tienen sesión de trabajo especial con los lanzamientos de falta. Pero, además, también hay espacio para la casualidad. Y es que el máximo especialista de este equipo en este tipo de acciones es Dani Pacheco, un jugador que, por fortuna, no estaba en el campo cuando se han producido las faltas en las que Raúl García ha sacado su magia.