Vitoria - José Bordalás cuentan las horas que faltan para que Dani Pacheco se presente en Vitoria y poder tener ya completo todo un arsenal ofensivo en el que va a contar con gran variedad de alternativas visto el perfil de los delanteros que le han proporcionado. El mediapunta malagueño propiedad del Betis responde a un perfil completamente diferente al de los atacantes que en estos momentos tiene a sus órdenes el preparador alicantino y abrirá todavía más el abanico de posibilidades de un entrenador que en sus primeras sesiones de trabajo ha evidenciado que va a apostar por una doble presencia en la punta del ataque, donde podrá realizar combinaciones muy variadas con hombres de características bien diferentes entre sí.

Pacheco representa ese perfil más técnico que no hay en estos momentos, ya que cuenta con calidad y velocidad para generar desequilibrios en el uno contra uno. Habilidoso, con una gran capacidad en el regate y también un buen disparo, el estilo del malagueño contrasta con el de delanteros mucho más poderosos desde el punto de vista físico como son los Gaizka Toquero, David Torres y Manu Barreiro. De la mano del Bordalás en el Alcorcón, el actual jugador del Betis actuó como extremo, pero también como acompañante del punta en una función que también puede desempeñar un Juli que ha demostrado moverse muy bien en el área actuando como segundo delantero.

Esa función de escudero del ariete de referencia es la que está llamado a desempeñar también un Toquero que ha brillado cuando ha actuado a las espaldas de un nueve de referencia. El vitoriano no es un consumado goleador, pero es un especialista en el trabajo gris y sucio que hace que sus compañeros de vanguardia brillen. Pelea y sacrificio están asegurados con su presencia, pero también velocidad y poderío en el juego aéreo.

Si Pacheco y Toquero están llamados a actuar como acompañantes del ariete de referencia, Barreiro tiene ante sí el reto de convertirse en ese delantero letal. El gallego dio un primer paso la campaña pasada completando una adaptación a la categoría que no le resultó sencilla y ahora la exigencia es que explote sus enormes cualidades -la combinación de físico, técnica y capacidad goleadora es difícil de encontrar- para convertirse en uno de los arietes de postín de la Liga Adelante. Falta por comprobar cómo va a adaptarse a las exigencias de un Bordalás que exprime al máximo a sus jugadores, pero en los entrenamientos queda claro que el de Santiago de Compostela en poco se parece al jugador que aterrizó hace un año en Vitoria y que tuvo que adaptarse físicamente al fútbol profesional.

La alternativa al pichichi albiazul de la pasada campaña es un Torres que puede ser el más desconocido para el seguidor alavesista, pero que en los primeros entrenamientos ya ha sacado a relucir su capacidad rematadora. El punta alicantino es un hombre de área, un ejecutor al que le gusta buscar el remate al primer toque y que ya ha evidenciado su buena puntería.

La inminente llegada de Pacheco servirá para cerrar una vanguardia de cuatro delanteros que cuentan con unas características bien diferenciadas que permitirán a Bordalás contar con diversas alternativas.