Vitoria - Los jugadores del Deportivo Alavés volvieron a pisar hierba natural por fin ayer. El último entrenamiento en dicha superficie se había llevado el 31 de enero, en la suave sesión previa al desplazamiento a Huelva. Tras el choque contra el Recreativo, el cuadro albiazul se encontró en su vuelta a Vitoria con la nieve y las siete sesiones de trabajo que se habían realizado desde entonces hasta ayer habían tenido como escenario superficies de lo más variopintas. Dos días de trabajo sobre el parqué de la ciudad deportiva del Baskonia, tres sesiones en la hierba artificial del polideportivo de Betoño, una cita en el tartán del módulo de atletismo de Mendizorroza y otro entrenamiento más, ya a cielo abierto, en el campo sintético de Aretxabaleta, el realizado el pasado martes. Así hasta que los jugadores volvieron a pisar hierba de verdad ayer en la localidad navarra de Viana, hasta la que el cuadro albiazul se desplazó para llevar a cabo su primer entrenamiento en condiciones de las dos últimas semanas en las Instalaciones Deportivas Príncipe de Viana.
El problema de ejercitarse durante tanto tiempo en superficies duras se ha evidenciado con diversos problemas físicos. Los futbolistas fueron sometidos el sábado por la tarde a pruebas para determinar su estado y las mismas sirvieron para descubrir que varios de ellos se encontraban muscularmente muy cargados. De ahí los problemas de Galán, Migue o Despotovic. La necesidad de volver a trabajar en las condiciones más parecidas a las habituales era ya imperiosa y por eso el Alavés se desplazó ayer hasta Viana para trabajar sobre césped natural y también en unas dimensiones propias de un campo de fútbol, una cuestión que ya se había podido trabajar el martes en Aretxabaleta.
El club albiazul también aprovechó la jornada de ayer para comenzar a despejar de nieve las instalaciones de Ibaia y así tratar de adecentar la ciudad deportiva para que pueda volver a ser utilizada cuanto antes. Así, se contrataron máquinas especiales para retirar el blanco elemento del campo de hierba artificial sin dañar la superficie y será ese terreno de juego el que acoja la sesión de trabajo de hoy.
La nieve ha obligado a cambiar muchos planes y a hacer alternativas durante los últimos días y lo mismo pasará en la preparación del partido ante el Barça B. Y es que el Alavés ha decidido adelantar unas horas su partida hacia la Ciudad Condal y, finalmente, se desplazará a tierras catalanas mañana a primera hora para llevar a cabo el último entrenamiento previo al partido por la tarde y quedar ya concentrado en la capital catalana para afrontar el duelo del sábado por la tarde en el Mini Estadi.
La semana resultará del todo curioso, ya que en el margen de apenas cuatro días el Alavés habrá entrenado en cuatro provincias diferentes y en tres comunidades autónomas distintas. El martes lo hizo en Gipuzkoa, ayer le tocó en Navarra, hoy lo hará en Araba y mañana, en Barcelona. Así, se completarán dos sesiones en Euskadi, una en Navarra y una más en Cataluña. Un periplo de lo más curioso por culpa de la nieve congelada que ha entorpecido el ritmo de trabajo del equipo durante los últimos días por culpa del temporal que ha dejado inutilizados todos los campos de fútbol de Vitoria. - DNA
