Xabier Ruiz de Ocenda es alavés. Tiene 27 años. Y hasta el domingo, día en que dirigió su último partido al conjunto albiazul, en la Txantrea, entrenaba al División de Honor Juvenil del Alavés. Compaginaba dicha labor, además, con su actividad con el sistema Amisco, un programa informático que analiza los registros físicos y de territorio recorrido por cada futbolista durante los partidos. La semana pasada, como en él era habitual, viajó a Zubieta simplemente para entregar los datos sobre el encuentro disputado por la Real Sociedad en Riazor.

Así coincidió con David Moyes, que no tardó en interesarse por el producto, y en acribillar a preguntas a Ruiz de Ocenda acerca del rendimiento físico y táctico de la plantilla. El vitoriano, en un perfecto inglés, respondió que él no trabajaba para el club donostiarra y que no le correspondía a él analizar los registros, tarea de dos personas con las que ya contaba la entidad. El técnico escocés no tardó en solucionar el contratiempo. “Loren, fíchalo”. Ruiz de Ocenda dijo que sí, claro, con una mezcla de sorpresa, estupor y tremenda alegría.

Desde las oficinas de Anoeta se pusieron en contacto con Javier Zubillaga, director deportivo del Alavés, para anunciarle que querían acometer la contratación y que el propio interesado también estaba por la labor. Todo fue tan rápido que Ruiz de Ocenda tuvo que dirigir el domingo al equipo juvenil, ante la dificultad de encontrarle un sustituto. Pero lo más curioso del caso es que así lo hizo solo dos días después de analizar en Anoeta y en tiempo real el encuentro ante el Elche. O de proprocionar a los técnicos un elaborado informe del Astorga-Oviedo del pasado fin de semana.

Moyes tiene incluso la intención de que baje al vestuario al descanso de los encuentros en Anoeta, para informar de los datos registrados por el sistema en la primera parte. Antes de dichos duelos, además, el técnico alavés se concentrará con la plantilla. Desde ayer, es ya un trabajador más de Zubieta, donde tiene a sus órdenes a los dos analistas que ya integraban el club. Así, su fichaje eleva a nueve el número de personas que trabajan mano a mano con David Moyes en el primer equipo del club realista.