un punto escaso
VITORIA. Solicitó refuerzos Juan Carlos Mandiá y el club, en este caso Javier Zubillaga, le regaló cuatro (Samuel, Tejera, Stevanovic y Raúl García). Solicitó también el técnico gallego el apoyo "fundamental" de la afición y lo obtuvo ayer con creces en Mendizorroza, donde se dieron cita 9.516 espectadores, una de las asistencias más altas de la categoría. Y solicitó finalmente el técnico de Alfoz a sus hombres actitud y entrega en cada una de las finales que le restan al equipo, y a fe que también ayer cumplieron como se esperaba. Sólo faltaba que el propio Mandiá centrase el tiro, moviera con cabeza sus peones y exigiera mucha más concentración a su escuadra para evitar disgustos como los vividos con Girona y Jaén.
Todo ese rosario de plegarias vieron la luz ayer, en todos los sentidos y en un partido notable donde salvo el error infantil que supuso el 0-1, el Alavés mereció mucho más. Cerró el partido ante el Córdoba con buenas sensaciones y una, "quizá", falta de paciencia y frescura en la segunda mitad, valoró el entrenador local, que vaticinó muchas victorias de aquí al final de temporada si el equipo despliega "el ritmo y juego de hoy (por ayer)". Lamentó, eso sí, errores defensivos como el que le costó el gol de ayer al Alavés, "una pena con un partido tan bueno", dijo Mandiá en ese sentido antes de celebrar la emergencia de jugadores como Guzmán, ayer uno de los más destacados. "Es fantástico que haya jugado tan bien y que se lo haya puesto difícil a Ion Vélez. Lo que necesitamos es que se suban al carro todos los que puedan, no sólo Guzmán", imploró el gallego en rueda de prensa.
El cambio de actitud en los jugadores respecto al día de Girona fue evidente. Un lavado de cara motivado, probablemente, por la presión de un entorno harto de mezquindades y la llegada de nuevo compañeros al equipo, que en estos momentos cuenta con 25 fichas. "Era una obligación jugar al ritmo que la gente quiere. Buscamos apretar y juntar las líneas todo lo que podamos, pero a veces no es fácil. Estamos con mucha presión encima pero el equipo ha demostrado ser capaz de competir en situaciones adversas", concluyó el técnico.