Vitoria. No le están resultando para nada sencillas las negociaciones al Deportivo Alavés en un mercado invernal en el que sigue sin pescar a pesar de llevar bastante tiempo lanzando su caña en diferentes direcciones. Ni siquiera cuando parecía que sus objetivos se encontraban a punto de morder en anzuelo se puede confiar la dirección deportiva del Paseo de Cervantes, que en la mañana de ayer se quedó sin la opción de hacerse con los servicios de Aritz López Garai, un futbolista que el miércoles a última hora declinó la propuesta de pasar la segunda parte del curso cedido en Vitoria y optó por hacer valer su contrato y continuar en las filas de un Sporting que ya había dado el beneplácito a su salida a préstamo hasta el 30 de junio. Por segunda vez esta temporada, los responsables de la parcela deportiva reciben la negativa del mediocentro vizcaíno, que ya fue un objetivo en verano que finalmente se convirtió en inalcanzable objeto de deseo por cuestiones económicas.
López Garai fue pieza indiscutible en el centro del campo sportinguista durante los primeros tres cuartos del curso, pero su escaso rendimiento propició su salida del once titular y también de las convocatorias. El futbolista, con amplia experiencia en Segunda, se quedaba sin hueco en los planes de José Ramón Sandoval y el club asturiano veía con buenos ojos su salida en el mercado invernal para ahorrarse parte del coste de su ficha. Eso sí, la decisión final del futbolista, tomada el miércoles por la noche y reafirmada en la mañana de ayer de manera pública, fue la de quedarse en Gijón y tratar de recuperar la confianza perdida.
"Creo que ya vamos a zanjar este tema. Ha habido interés de varios equipos por hacerse con mis servicios, ya sea en propiedad o mediante cesión, pero yo he hablado con la gente que tengo para estas cosas y mi familia y he decidido que me voy a quedar e intentar cambiar esta dinámica negativa que llevo y ser importante para el equipo. He hablado con el entrenador y quiere que me quede. No me he visto fuera porque la decisión la tengo que tomar yo", señaló ayer el mediocentro vizcaíno.
De entre todas las opciones que manejó, la del Alavés era la más atractiva y hasta el último segundo tanto el Sporting -a través de su director general, Alfredo García Amado- como el propio conjunto vitoriano estuvieron intentando convencerle para que aceptara la propuesta de cesión hasta el 30 de junio que los dos clubes ya tenían cerrada a falta de la firma del propio interesado, que finalmente rechazó la propuesta.
"El Alavés ha mostrado muchísimo interés, hasta el último minuto han estado insistiendo con Alfredo para que fuera cedido durante la segunda mitad del año y es el equipo que más me ha hecho dudar porque es un buen club, con buen estadio, ciudad deportiva y afición. Es el que más tilín me ha hecho, pero no voy a ir", señaló.
López Garai ha preferido buscar una nueva oportunidad en un club con opciones de ascenso antes que aceptar la oferta de otro que está jugando por la permanencia. El Gijón no tiene, ni mucho menos, la oportunidad de jugar asegurada, algo que sí tenía en Vitoria. En cambio, deportiva y económicamente la opción de la continuidad es la que considera más favorable para sus intereses, ya que tiene firmado un año más de contrato con un club que puede subir a Primera.
nuevo revés Así las cosas, el Alavés se ha llevado esta temporada el segundo varapalo con López Garai, ya que en verano ya era una de las prioridades para fortalecer el centro del campo. Es, sin duda, la constatación de las dificultades que está teniendo la dirección deportiva albiazul para que sus primeras opciones se transformen en incorporaciones, una situación que ya se vivió en verano cuando varios futbolistas deseados eligieron otros destinos diferentes a Vitoria.
La búsqueda, prioritariamente de un central y de un mediocentro, continúa abierta, pero lo que es ya evidente es que tampoco podrá contar con nuevas alternativas mañana Juan Carlos Mandiá. El mercado entrará en sus dos semanas decisivas a partir del próximo lunes y el Alavés se hallará también en un particular estado de necesidad, ya que precisa, como poco, de dos nuevas incorporaciones para que su plantilla no se quede coja.
Eso sí, con la cercanía del cierre del mercado también saldrán al escaparate algunos jugadores que en estos momentos son inaccesibles pero que, al igual que determinadas cesiones de futbolistas con proyección que necesitan minutos que ahora no pueden producirse por el cúmulo de partidos de Liga y Copa que tienen los clubes de Primera, cuando el calendario se vaya acercando al 31 de enero se pondrán a tiro y será entonces cuando habrá que atinar para conseguir esos refuerzos que aporten un salto de calidad al conjunto.