GASTEIZ. La alegría de Borja Viguera fue doble o triple en La Nueva Victoria. Gol del empate, paso de gigante al ascenso y renovación para la próxima temporada con el Deportivo Alavés. Tres por uno para el riojano, el jugador más desequilibrante de los albiazules a lo largo de la presente temporada y que la siguiente seguirá metiendo goles y arrancando aplausos de la grada de Mendizorroza. El atacante formado en la cantera de la Real Sociedad alcanzó el pasado domingo ante el Jaén los treinta compromisos ligueros disputados -con un mínimo de 45 minutos en cada uno de ellos- a lo largo del curso y de esta manera hace válida la cláusula de renovación que se incluyó en su contrato cuando decidió abandonar definitivamente la disciplina txuri urdin tras varias cesiones para comenzar a volar en solitario en Vitoria, donde se ha reencontrado con su mejor versión.

Con la renovación de Viguera pone el Alavés una nueva piedra en su proyecto para la próxima temporada, ya sea como todo el mundo desea en Segunda División o, si todo se tuerce, permaneciendo en la categoría de bronce. De una u otra manera, se asegura la entidad del Paseo de Cervantes la continuidad del que ha sido el buque insignia del equipo esta temporada, su máximo goleador con catorce dianas -a las que hay que añadir otras tres en Copa- y el futbolista que ha levantado a los aficionados de sus asientos con varias acciones antológicas. Joven pero al mismo tiempo con experiencia, además de desequilibrante en los metros finales y recuperado para el fútbol después de haber dejado atrás una etapa negra marcada por una grave lesión de rodilla. Y, por si fuera poco, esta temporada ha dejado atrás la irregularidad que le había marcado a lo largo de toda su carrera.

La renovación de Viguera es la cuarta que se ha producido esta temporada merced a la cláusula de partidos suscrita por la mayoría de los integrantes de la actual plantilla cuando suscribieron su vinculación con el club vitoriano. La dirección deportiva quiso asegurarse de esta manera la continuidad para la campaña venidera de los futbolistas que fuesen más importantes en el actual proyecto y así ya se ha aseguirado la continuidad de Óscar Rubio, Iván Crespo y Manu García además de la del propio atacante riojano. La renovación de estos cuatro futbolistas estaba sujeta únicamente a la disputa de treinta partidos, que eran quince en el caso del guardameta al ser incorporado en el mercado invernal. Otros futbolistas, además de la disputa del 80% de los compromisos ligueros en los que se incluía el play off, tienen añadida la cláusula del ascenso para ganarse la continuidad durante un año más en Vitoria. Así, si para Viguera la alegría llegó por varios frentes en Jaén, para Luciano o Jaume la satisfacción puede ser doble si se asciende el sábado en Mendizorroza. Tanto el central gallego como el mediocentro catalán ya han rebasado la cifra de treinta partidos disputados y están a la espera de subir a Segunda División para ver automáticamente renovado su contrato.

La única excepción entre los futbolistas que han superado ya la treintena de compromisos oficiales está reflejada en la figura de Javi Hernández. El central manchego supone un caso especial dentro de la plantilla, ya que no aceptó ninguna cláusula de renovación automática. El defensa que llegó procedente del Alcorcón ha sido una pieza fundamental para Natxo González, siendo titular en todos los partidos en los que ha estado disponible. Por esa razón, parece evidente que tiene garantizado un hueco en el próximo proyecto, aunque el club tendrá que sentarse a la mesa para negociar un nuevo vínculo.

La opción de ascender este mismo sábado abre las puertas a un par de renovaciones más. Tanto Guzmán como Beobide se encuentran a solo dos partidos de asegurarse la continuidad para la próxima campaña. Si se sube ante el Jaén, donde los dos pueden ser titulares, aún quedarían por delante otros dos compromisos para dirimir el campeón de Segunda B en los que tendrían que participar al menos durante un tiempo completo para renovar. Para el resto, la renovación por objetivos solo podría producirse en caso de perder contra los andaluces, lo que abriría la puerta a disputar otros cuatro compromisos más.

En todo caso, la dirección deportiva albiazul se guardó un as en la manga cuando suscribió los contratos el pasado verano. En casi todos los casos existe una cláusula de renovación unilateral por parte del club para asegurarse la continuidad de todos aquellos futbolistas que le parezcan interesantes de cara a su nuevo proyecto. Así las cosas, entre los que renueven automáticamente y los que lo hagan por la decisión de la dirección deportiva, en torno a la mitad de la actual plantilla seguirá vistiendo la camiseta albiazul.