con paso firme. Así transita el Deportivo Alavés a lo largo y ancho de una temporada 2012-13 que, hasta la fecha, está resultando satisfactoria y en la que se han ido cumpliendo a rajatabla, y con cierto margen de tiempo, todos los objetivos que se habían marcado de antemano. Primero fue una brillante participación en la Copa del Rey culminada con el premio de la eliminatoria con el Barcelona. Después, dentro del torneo de la regularidad que es donde el equipo se juega de verdad las habichuelas, se aseguró la presencia en el play off de ascenso siendo el primero de toda la categoría en conseguirlo. Ayer se completó el segundo gran objetivo de la temporada, asegurar un liderato del Grupo II que permite encarar el play off con enormes garantías. Para alcanzar el tercer objetivo, el prioritario, se lo jugará todo El Glorioso en la eliminatoria de campeones, pero sabiendo que hay red debajo si falla, ya que si es eliminado en ese cruce con otro campeón se reenganchará de nuevo a la fase de ascenso.
Con anterioridad, el Alavés había sido campeón en categorías nacionales en otras doce ocasiones. Lideró la Segunda División tres veces (1929-30, 1953-54 y 1997-98), su grupo de Segunda B en otras tres ocasiones además de la actual (1992-93, 1993-94 y 1994-95), y el de Tercera seis veces (1940-41, 1960-61, 1964-65, 1967-68, 1973-74 y 1989-90). Tras lograr el liderato del Grupo II, el conjunto vitoriano buscará ahora el ascenso directo (sería la decimotercera vez que conseguiría subir) ante otro líder de grupo y, de conseguirlo, optará a proclamarse campeón absoluto de la categoría de bronce.
Pero para llegar a esas altura de temporada todavía hay que remar mucho. De momento, lo que se ha asegurado Natxo González y su equipo es una semana de cierta calma, ya que el partido del próximo domingo en Estella no servirá absolutamente para nada. La única aspiración, por eso de quedar mencionado en los libros de la historia futbolística, es igualar los 82 puntos, récord de la categoría que en estos momentos comparten Levante, Murcia y Mirandés. Pero no se va a dejar los cuernos el Alavés en conseguirlo, ya que se utilizarán los días venideros para oxigenar a la plantilla y seguramente ante el Izarra jugarán los menos habituales, ya que se pretende recuperar a los futbolistas que arrastran molestias, que no son pocos, y preservar al equipo de posibles lesiones o sanciones de cara al play off.
Y es que la próxima cita importante para este club no se dirimirá sobre el césped. Será en un salón de actos oficiales, concretamente en el de la Federación Española de Fútbol, donde se determinará el camino que tendrá que seguir el Alavés en su camino de regreso a Segunda División. El lunes 20 de mayo, a las 16.30 horas, la suerte determinará cuál será su oponente en una eliminatoria de campeones para la que ya está clasificado el Tenerife (Grupo I) desde la semana pasada. Los otros dos campeones de lote aún están por definir. En el Grupo III, el Hospitalet lo tiene todo a su favor ante el Huracán, ya que con un empate los catalanes se asegurarían el primer puesto al contar con dos puntos de ventaja y el gol average general favorable. Más compleja es la situación en el Grupo IV, donde el Jaén está en cabeza con dos puntos de renta sobre el Cartagena, pero con el gol average particular perdido.