Vitoria. Las condenas contra Dmitry Piterman y los secuaces que le rodeaban durante su período al frente del Deportivo Alavés se siguen sucediendo dentro de ese largo proceso concursal que continúa abierto y ofreciendo sentencias favorables a los intereses del club, aunque desde la entidad del Paseo de Cervantes no se guarda ni la remota esperanza de recuperar algún día todo el dinero que salió de sus arcas en aquel trienio de manera fraudulenta o sospechosa. En su último fallo, el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Vitoria ha estimado íntegramente la demanda de los administradores concursales por la "ineficacia de los actos de disposición a título gratuito realizados por los anteriores miembros del consejo de administración de la concursada a favor de Dmitry Piterman, José Nereo Ruiz, César Martínez, José María Carmona y Antonio Avilés" a los que se condena solidariamente, junto a los anteriores directivos, a reintegrar a la masa activa del concurso un total de 165.799,12 euros -intereses incluidos a los que hay que añadir la imposición de las costas del proceso- dividido en distintas cantidades según se repartiese el dinero entre el expresidente y su grupo de acólitos, que ahora deberán reintegrar -si no interponen recurso, como tienen posibilidad- solidariamente las cantidades citadas.
En el informe concursal presentado por los administradores en 2007 se recogían estos gastos generados por el entonces presidente y su entorno y se calificaban como "liberalidades, desproporcionados y suntuarios". Ahí estaban la adquisición de la franquicia California-Victory, el patrocinio del Atenea de fútbol sala, los gastos de la directiva y su personal vinculado en el Hotel Lakua o los gastos en viajes personales de la esposa del presidente, Milanendra Vikramsingh.
Todo ello a añadir a facturas de dudoso contenido abonadas antes de su emisión, la existencia de una cuenta corriente en el Banco de Sabadell sin reflejo en la contabilidad del club, la contratación de empresas administradas por los directivos con servicios no demostrados, la compra de material electrónico que nunca llegó a la entidad o la autocontratación de Piterman como asesor a través de Management Deportivo. En todos los casos el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Vitoria ha aceptado las demandas de la administración concursal, dando validez a todas las peticiones de reintegración a la masa activa del concurso.
En esta nueva sentencia, se condena solidariamente a Piterman, Milanendra Vikramsingh, José Nereo Ruiz y Jugovic S.L. (los componentes por entonces del consejo de administración encabezado por el empresario ucraniano que ya fueron declarados culpables en el concurso de acreedores y castigados con penas económicas e inhabilitaciones para la administración) en "concepto de perjuicio patrimonial causados por los actos de disposición realizados" en favor de los propios Piterman y Nereo, además de César Martínez, José María Carmona y Toni Avilés. Presidente, vicepresidente, dos de los hombres de máxima confianza del ucraniano y el preparador físico.
La condena de pago solidario se divide entre el consejo de administración que por entonces regía el Alavés y los beneficiados por esos "actos de disposición a título gratuito". Así, en el caso de Piterman el pago asciende a 43.702,65 euros con los intereses legales devengados ya añadidos; en el de Nereo, a 36.117,01; en el de César Martínez, a 32.307,83; en el de José María Carmona, a 25.099,26; mientras que en el de Toni Avilés la cantidad se eleva a los 28.552,35 euros.
Dentro del informe concursal, estos deudores, junto a otros, figuraban como "clientes de dudoso cobro" y se les solicitaba la reintegración de los gastos generados sin necesidad alguna, ya que todos ellos disponían de importantes ingresos a través de dietas y kilometrajes para los desplazamientos, así como una nómina mensual por una suma económica bastante elevada.