Vitoria. Vive Natxo González pendiente estos días de la cantidad de jugadores que podrá recuperar de cara al compromiso con el Eibar de mañana. Nadie hay descartado, de momento, para el compromiso de mañana, aunque parece evidente que el preparador vitoriano no va a poder contar con todas sus piezas en un estado óptimo de forma. Con mayores o menores posibilidades, los cinco tocados que arrastra el equipo aún no están descartados.
En dos casos parece evidente que la ración de grada está asegurada. Se trata de Javi Hernández y Luismi, quienes ayer hubieron de quedarse de nuevo en el gimnasio. La recuperación de la rotura de fibras en el bíceps femoral que padece el primero parece ir viento en popa, pero se trata de una lesión complicada y no conviene demasiado arriesgar en una temprana recuperación. En el caso del segundo, aquejado de molestias en el gemelo, también su ausencia durante las últimas semanas provoca que su estado de forma no sea el adecuado.
Los otros tres jugadores que arrastraban problemas, Beobide, Agustín y Jonan, trabajaron ayer con el grupo. La recuperación ya parece una realidad y aunque se hayan perdido algún entrenamiento en los últimos días todo hace indicar que estarán disponibles. >DNA