Vitoria. La preocupación por las lesiones en el seno del Deportivo Alavés es evidente y ayer fue Natxo González el que afirmó tajante que tanto problema le va a acabar pasando factura al equipo en el futuro, ya que ahora no está pudiendo trabajar en condiciones óptimas por la ausencia de futbolistas y se está sobrecargando a otros jugadores. "La factura se pagará, desde luego. Eso lo tengo muy claro. A corto no estamos sufriendo y estamos ganando, pero a medio plazo me preocupa. Esto al final carga mucho a determinados jugadores y hay menos competitividad", señaló.
En ese sentido, en el del posible bajón en el rendimiento del equipo, el preparador albiazul también tiene claro que no toda la temporada va a ser un camino de rosas como hasta ahora y que seguro que al equipo le llega un bajón: "La dinámica que llevamos de puntos es muy fuerte y seguro que si acabamos la primera vuelta con más de cuarenta puntos, en la segunda ya digo que tantos no vamos a sacar. En el momento que bajemos un poquito de este nivel en el que estamos se va a empezar a dudar. A partir de ahí, si es una pugna como ahora entre Alavés y Eibar, veremos quién aguanta más. Pero siempre digo que vamos a tener baches, que los que vienen por detrás se nos van a acercar porque el Athletic viene como una moto y nadie habla de ellos y es el equipo que ahora mismo más me preocupa. Esto no va a ser fácil ni una pugna entre Alavés y Eibar". En este sentido, el tropiezo de ayer armero se presenta como "una oportunidad para ampliar un poquito la renta".
Todo ello para hacer frente a un Zaragoza B que llega en un buen momento a este partido. "Les pillamos en una buena dinámica tras siete jornadas sin perder. Es un equipo muy equilibrado que no encaja muchos goles, solo uno por partido, que no es mucho para estar abajo. Su punto fuerte es la velocidad arriba, no elabora en exceso y busca ataques rápidos, así que tenemos que tener mucho cuidado y no dejar muchos espacios a la espalda de la defensa porque ahí nos pueden hacer mucho daño", advirtió.