Vitoria. Ensayo general para un duelo que ojalá pueda volver a ser una realidad en el futuro próximo. Sólo que esa vez, la cita tendría lugar en la competición de Liga. Ese es el sueño de todo el alavesismo, poder contemplar de nuevo al Glorioso competir en Primera División y por eso, mientras llega ese ansiado momento, se debe conformar con el encuentro de esta noche en el Camp Nou y afrontarlo como una excelente preparación para lo que está por llegar.
Así las cosas, el duelo de hoy entre albiazules y blaugranas no puede tener otro calificativo que el de festivo. Para una plantilla en la que la inmensa mayoría de sus integrantes no ha pisado nunca el césped del coliseo barcelonista en competición oficial poder enfrentarse al mejor equipo del mundo supone, indudablemente, un premio que recordará toda su vida.
Poco importa en esta oportunidad el resultado que refleje el marcador a la conclusión de los noventa minutos reglamentarios -la eliminatoria quedó resuelta en la ida disputada en Mendizorroza gracias al 0-3 obtenido por los de Tito Vilanova-. Bien es verdad que el Alavés hará lo posible y lo imposible por tratar de plantar cara y que cuanto más favorable sea el desenlace final mayor será la satisfacción pero no lo es menos que, en una contienda tan desigual, lo más positivo es aprender todo lo que se pueda para trasladar esos conocimientos después a la realidad diaria y exprimir al máximo la experiencia.
Dentro de este carácter lúdico, en cualquier caso, se encuentra también el espíritu competitivo con el que el conjunto vitoriano acude al Camp Nou. Al igual que ya ocurrió en el duelo escenificado en el Paseo de Cervantes, el plantel de Natxo González tratará de ofrecer su mejor perfil para, dentro de las posibilidades, tutear a todo un Barcelona.
Ello no es óbice para que todo el mundo en el seno del club sea consciente de que la prioridad absoluta del equipo en la presente temporada es la competición liguera y, por ello, se tendrá muy en cuenta el compromiso del próximo fin de semana contra el Racing de Santander B. Ello implicará que el técnico albiazul trate de repartir el esfuerzo entre sus jugadores conjugando también la ilusión que todos ellos tienen por ser de la partida.
Estreno en la portería Donde es segura la rotación es en la portería. Y es que las lesiones de Miguel Martínez y Urtzi Iturrioz han motivado que sean los guardametas del filial quienes comparezcan en Barcelona para defender la mera del primer equipo. Así, Sergio Herrera debutará en esta cita del máximo atractivo y su habitual suplente Sergio Pérez le cubrirá las espaldas desde el banquillo.
Por lo que respecta al resto de la alineación, es probable que Natxo González conceda minutos a aquellos que menos esfuerzo han acumulado últimamente. Junto al joven Sergio Herrera en la portería podrían formar Óscar Rico, Agustín, Javi Hernández, Salcedo; Jaume, Miki; Guzmán, Jonan, Luismi; y Viguera. En cuanto al Barcelona Tito Vilanova, que no podrá contar con el lesionado Dani Alves, ha decidido dar descanso a estrellas como Messi, Xavi Hernández, Iniesta, Víctor Valdés, Busquets, Piqué y Jordi Alba.