Vitoria. El nombre de Víctor Fernández quedará esta temporada eternamente ligado al Lleida Esportiú. Gracias a este futbolista, más concretamente a su indebida presencia en el choque que enfrentó al conjunto catalán con el Unión Deportiva Logroñés en la segunda jornada liguera, debe el cuadro ilerdense en estos momentos su presencia en la tercera posición del Grupo II y también su estancia en la zona noble, la que marca qué cuatro equipos disputarán play off. Tercero en la realidad, sí, pero un tercer puesto muy engañoso.

La historia, ya bastante conocida, le permitió al Lleida ganar en los despachos tres puntos que no había conseguido conquistar sobre el terreno de juego de Las Gaunas. Víctor Fernández se encontraba sancionado tras haber sido expulsado en el primer compromiso liguero, pero los responsables del UD Logroñés creyeron haber cumplido con ese partido de suspensión en el partido copero disputado entre semana. Craso error, ya que desde la pasada campaña las sanciones -excepto las especialmente graves- han de cumplirse en la misma competición en la que se han originado. Así, el lateral izquierdo procedente del Guadalajara jugó contra el Lleida en un partido que acabó empatado (1-1) y en el que él debería haberse quedado en la grada.

La reacción ilerdense al conocer el error riojano fue la lógica y recurso en mano solicitó la alineación indebida que le fue concedida y que le otorgó los tres puntos por un resultado 0-3. Es decir, dos puntos más de los logrados sobre el terreno de juego y también tres dianas más en el diferencial del gol average general del equipo.

Es precisamente esa diferencia entre los goles encajados y los recibidos (+10) la que le permite al único conjunto catalán del Grupo II ocupar la tercera plaza en la tabla. El damnificado, en este caso, es el Amorebieta (+9), que sería tercero de ser el coeficiente del Lleida el real de +7 que ha cosechado con su juego, aunque esta cábala se queda en nada teniendo en cuenta que también habría que quitar del casillero ese par de puntos de más otorgados por el triunfo en los despachos que en Logroño solo pudo ser un empate.

Sin esa victoria adicional, el Lleida contaría con veinte puntos en su casillero, ocuparía el quinto puesto del grupo por detrás del Bilbao Athletic y a dos puntos del play off y, además, se vería seriamente amenazado por la Real Sociedad B y el UD Logroñés, que solo estaría a dos puntos de diferencia de los ilerdenses (y no a los cinco actuales) de no haber metido la pata.