Vitoria. El Deportivo Alavés ha tardado lo suyo en abrir la espita de los fichajes pero, una vez hecho, parece que el goteo de nuevas incorporaciones va a resultar incesante. De esta manera, el conjunto albiazul confirmó en la tarde de ayer la llegada al nuevo equipo que dirigirá Nacho González del vitoriano Manu García. Nacido en la capital alavesa el 26-4-1986, se trata de un centrocampista zurdo que regresa a casa para reforzar la banda izquierda del ataque del conjunto de Mendizorroza, con el que se ha comprometido para el próximo ejercicio. Potente físicamente con sus más de 180 centímetros de altura, puede actuar tanto de interior como de extremo e incluso en alguna ocasión ha ejercido de improvisado lateral.

La polivalencia, por lo tanto, es una de sus virtudes aunque ni mucho menos la única. Y es que es un jugador dotado de buenas dosis de calidad que, pese a no situarse sobre el césped en las posiciones de delantero puro, siempre asegura una considerable ración de goles. De hecho, en la pasada campaña consiguió siete diánas en los 34 encuentros ligueros que disputó en las filas del U.D. Logroñés. Precisamente su rendimiento fue una de las claves del espectacular final de campaña de la escuadra riojana, que a punto estuvo de colarse en el play off de ascenso tras haber protagonizado un inicio de campeonato muy por debajo del nivel esperado. La llegada del técnico Pepe Calvo a Las Gaunas sirvió para reactivar al plantel rojiblanco y el jugador vitoriano se convirtió en un indiscutible en sus alineaciones. Únicamente unos problemas físicos en su tobillo le apartaron del césped durante algunos choques.

Más que satisfecho con su rendimiento, el Logroñés -entidad a la que había llegado en el mercado de invierno del ejercicio 2010-11 procedente del Eibar- trató de retenerlo y le ofreció la renovación pero, sin embargo, García ha optado por atender la llamada del equipo de su ciudad y embarcarse en el siempre ambicioso proyecto albiazul.

Antes de esta vuelta a los orígenes, el centrocampista vitoriano, de 26 años de edad, ha militado en el filial de la Real Sociedad B, el Real Unión, el Eibar y el citado Logroñés, dejando en todos ellos una estela de jugador comprometido, excelente profesional y dispuesto a dejarlo todo sobre el césped. Todo ello, claro está, acompañado por una buena visión de juego y calidad en el desborde que ofrece al equipo buenas alternativas ofensivas.

La de Manu García, en cualquier caso, no será ni mucho menos la última incorporación a la plantilla alavesista antes del inicio de la pretemporada el próximo día 9 de julio. Porque con únicamente cinco jugadores -Asier Salcedo, Óscar Rubio, Urtzi Iturrioz, Jagoba Beobide y el propio García- en nómina con los que se cuenta en estos momentos, el trabajo que tiene por delante la secretaría técnica de Javier Zubillaga todavía es ingente. Así, el rosario de fichajes se alargará durante los próximos días.