Vitoria. Aislado de todo. De vuelta en su Madrid natal "disfrutando de la familia" y del recio "sol madrileño", Carlos Indiano echa la vista atrás para evaluar sus dos años de estancia en Vitoria. Sus dos años de estancia, en lineas generales, y, en concreto, el agitado último mes para medios y afición. Todo lo contrario de lo vivido por el centrocampista y la casi totalidad de la, hasta hace poco, plantilla babazorra. El mutismo para con el plantel ha caracterizado los últimos coletazos de la temporada alavesista desde los despachos y el caso de Indiano no es una excepción.
Esta excesiva reserva de la directiva en sus relaciones con los jugadores tiene su origen en una temporada decepcionante. El centrocampista madrileño no elude la realidad: "Ha sido un año malo, hay que reconocer las cosas como son". Indiano repasaba las causas que han llevado a este desenlace dentro de una "temporada difícil". "Ha sido un año duro, en realidad. Estás en un club importante, con el objetivo de intentar subir a Segunda o, al menos, disputar el play off de ascenso. No se ha conseguido el objetivo, entonces el año ha sido malo", recalcaba.
Conocidos los orígenes, llega la conclusión del curso para los jugadores, ya conocida por todos: el desierto comunicativo. Un proceder nada habitual ni en el deporte profesional ni en el ámbito futbolístico. De hecho, el madrileño reconocía "no haber vivido nunca nada similar", aunque admitía, a continuación, que viene "de un filial y la exigencia no es la misma".
Indiano es meridiano en lo que a su relación con la directiva del Alavés hace referencia. "A mí se me acabó el contrato y, a día de hoy, no tengo ninguna noticia por parte del club", aseguraba el medio en el día de ayer. El madrileño se mostraba comprensivo con una situación que sabía que podía acontecer. "Yo era consciente de que el club, a lo mejor, ni me llamaba", reconocía aunque, asimismo, esperaba cierta deferencia por los servicios prestados. "Estábamos pendientes de que el club nos transmitiera algo: un sí o un no, pero que nos dijese algo o nos agradeciese los dos años que hemos estado allí ya que yo creo que; dentro de lo malo que ha sido este año, también hay que reconocer las cosas como son; el club no puede tener palabras mías de falta de respeto u otras cosas similares. Al menos esperaba cierto agradecimiento por haber estado allí, haber defendido la camiseta... Pero son decisiones que toma el club y hay que respetarlas ante todo" confesaba resignado.
Indiano opina que "hay gente que exige mucho por lo que han hecho en el basket", aunque se niega a "hablar mal" de un sitio donde ha estado "muy a gusto y muy orgulloso de defender esa camiseta". En cuanto al supuesto interés del Logroñés, "puede haberlo o, a lo mejor, estamos esperando una oferta más importante pero realmente no lo sé, es mi representante quien lleva el tema".
