Vitoria. Arranca un año de ilusiones para el Deportivo Alavés en el que la vista está fijada en convertir el mes de junio en glorioso, pero para llegar a dichas fechas con opciones de hacer algo grande hay que sembrar a lo largo de las semanas precedentes. Por ello, el equipo de José Carlos Granero inicia el año competitivo con la intención de mantener y mejorar la buena senda de resultados que se han cosechado desde la llegada al banquillo del preparador valenciano. La mejoría en los últimos tiempos ha sido evidente, pero ahora queda corroborar toda esa evolución con el salto de calidad definitivo que permita al cuadro vitoriano asentarse entre la elite del Grupo II.

El Alavés cerró el año 2011 de la mejor manera posible, con una victoria ante el por entonces invicto Mirandés. Además de tres puntos muy importantes para acceder a puestos de play off, la plantilla albiazul recibió un espaldarazo anímico muy importante. Muchas cosas había que hacer bien para superar a un oponente que está sembrando el terror en Liga y Copa y el equipo de Granero se sacó de la chistera un partido brillante que demuestra que el trabajo va por buena senda.

El reto ahora es dar continuidad a esa victoria que tan lejana queda ya en la mente del alavesismo con tres nuevos puntos que le sirvan al conjunto vitoriano para asentarse definitivamente entre la aristocracia del grupo. Ni antes ni después de la llegada de Granero se han conseguido enlazar dos triunfos seguidos y el compromiso que abre el año ante la Gimnástica de Torrelavega se presenta como una nueva ocasión para conseguirlo.

Eso sí, no son facilidades las que se van a encontrar los alavesistas en la búsqueda de su objetivo. El cuarto puesto de los locales y el noveno de los visitantes resultan bastante engañosos. Más fiables son los puntos que señalan que entre alaveses y cántabros el margen es mínimo. Un punto nada más separa a estos dos equipos, así que confianzas, las justas.

De eso se ha encargado de avisar Granero a lo largo de una semana en la que el preparador valenciano ha estado aún más activo que de costumbre recordando a sus pupilos su particular libreto. Le preocupa al técnico alavesista el largo parón propiciado por las vacaciones navideñas y el partido se plantea para el equipo como un examen para conocer su respuesta después de casi un mes sin haber disputado partidos de competición.

Podría ser, además, un compromiso con notables novedades. La más destacada, el más que probable debut de Rubén Palazuelos. El centrocampista cántabro ha convencido a Granero en las dos semanas que lleva trabajando a sus órdenes y la única duda reside en su resistencia física después de seis meses sin competir oficialmente. Así, el preparador albiazul medita si otorgarle la titularidad o reservarle para la segunda parte, situación similar a la que se vive con Casares, aún renqueante. En el resto del once, la principal novedad puede ser la reubicación de Geni en punta por la baja de Azkorra.