¿Cómo está viviendo esta nueva experiencia que ha comenzado con la camiseta del Amorebieta?

Pues la verdad es que muy bien. Todo ha empezado perfecto, con unos resultados muy positivos y estoy muy contento porque todo nos está saliendo redondo y esperamos que todo siga así. El objetivo para nosotros no puede ser otro que la permanencia y este arranque de temporada nos lo puede facilitar mucho.

Visto desde fuera, sorprende el sensacional arranque de curso que ha protagonizado su equipo.

El que no nos conozca puede decirlo, pero lo cierto es que se han hecho muy bien las cosas. Por una parte, se ha mantenido el bloque principal de diez o doce jugadores que consiguieron el ascenso desde Tercera División, mientras que por otro lado se ha aprovechado la coyuntura que vive el fútbol, con muchos jugadores que prefieren no moverse de su entorno, para fichar a varios futbolistas que ya tienen una amplia experiencia. Esta mezcla está funcionando muy bien y si a eso le unimos la enorme ilusión que hay en el club y la afición por este primer año en Segunda B, nos encontramos con que todo nos está saliendo muy bien.

¿Hay alguna fórmula mágica?

Siempre digo que todos estos buenos resultados han llegado gracias a la ilusión y al trabajo. Este equipo es el primer año que está en esta categoría en toda su historia y desde el primero hasta el último del equipo, desde el primer aficionado hasta el último trabajador del club, todo el mundo tiene una enorme ilusión este año. Luego está el trabajo, que está siendo muy bueno en los entrenamientos y eso es algo que se refleja en el campo. El entrenador es debutante en la categoría como técnico, pero ya tiene mucha experiencia en Segunda B como jugador.

Lo que es evidente es que la fortaleza defensiva del equipo está siendo clave para sumar muchos puntos en estos primeros partidos.

Nos están metiendo pocos goles y nos generan muy pocas ocasiones. Con esta base, el equipo está muy fuerte, pero esto no solo es cosa de la gente de atrás, sino de todo el equipo. Si los once que están sobre el césped trabajan es mucho más fácil que se consigan estos números. Además, adelante estamos acertando y eso es lo que nos está dando los puntos hasta ahora.

Están rentabilizando al máximo todos sus goles, ya que hasta la última jornada habían conseguido catorce puntos con cinco dianas.

Estamos sacando mucho partido a cada gol. Hasta el fin de semana pasado, que conseguimos cuatro, solo habíamos marcado cinco, pero muy bien rentabilizados. Al final lo importante es sacar los puntos y lo estamos consiguiendo a base de ser sólidos en defensa y de aprovechar muy bien el peligro que generamos en ataque. Somos un equipo que intenta apretar mucho, al que no le gusta dar un balón por perdido e intentamos ser fuertes y apretar al máximo.

En el plano personal, y a pesar de unos pequeños problemas físicos, está siendo una pieza importante en el Amorebieta.

Estoy muy contento a pesar de que no he podido jugar algunos partidos por culpa de unas molestias. Ahora está muy complicado jugar en este equipo porque nos está saliendo todo muy bien, el que sale está dando un magnífico resultado y pone a los demás las cosas muy caras. He participado mucho y las cosas me están saliendo bastante bien.

Mucha gente se sigue preguntando cómo acabó usted en un recién ascendido como el Amorebieta a pesar de tener otras ofertas.

Desde el momento en el que supo que quedaba libre y que no iba a seguir en el Alavés, el entrenador puso mucho interés en que fichase y comenzó a llamarme constantemente. No quería moverme de casa y el entrenador puso mucho empeño, llamándome todos los días para convencerme de que iba a estar a gusto y la verdad es que no me arrepiento.

Habrá notado mucho el cambio de vestir la camiseta del Alavés a portar ahora la del Amorebieta.

Está claro. El Alavés es un club completamente profesional, mientras que el Amorebieta es más amateur. Eso sí, a pesar de esa diferencia, los dos equipos estamos en la misma categoría, aunque es cierto que el cambio es enorme en todos los sentidos: socios, repercusión... En el Alavés todo es mucho más grande que en el Amorebieta.

¿Le sigue dando vueltas al 'culebrón' que protagonizó en verano?

No le doy más vueltas porque con eso no se consigue nada. Igual enfadarte un poco y no soy de esos. Le estoy muy agradecido al Alavés por cómo me ha tratado en el año y medio que estuve y también al presidente porque conmigo se portó muy bien, dando la cara en todo momento. Lo único que puedo achacar es que se tardara tanto en decir que no contaban conmigo, pero hay que asumir todo y mirar para adelante porque lamentarse no sirve de nada. Está claro que el Alavés es un gran club en el que a todo el mundo le gustaría estar, pero no hay que darle más vueltas.

Le toca visitar la que fuera su casa, ¿qué le dice este nuevo Alavés?

Parece que las aguas están un poco revueltas, pero el contacto que tengo con mis amigos no me deja la sensación de que las cosas estén tan mal. El Alavés está muy cerquita de los puestos de play off y está ahí metido. Es un equipo pensado para estar arriba desde el primer momento, pero creo que todavía es pronto y que queda mucha competición para que esté donde le corresponde.

¿Le sorprende que haya empezado la temporada tan mal?

Yo no diría que esté mal, aunque está siendo muy irregular. Numéricamente no está mal porque está cerquita de los puestos de arriba. Lo único que es verdad es que había ilusión y que la gente esperaba que desde el primer momento el Alavés estuviese arriba, pero es una categoría y un grupo muy igualado y competitivo y las cosas van a estar parejas. El Alavés, más pronto que tarde, se va a meter arriba y no va a dejar ya esos puestos de privilegio.

Hablaba de aguas revueltas, ¿tratará de pescar en ellas el Amorebieta este domingo?

Claro. Nuestra intención es sacar algo positivo. Hasta ahora fuera de casa nos han salido bien las cosas quitando solo el partido de Ponferrada. Hemos ganado tres partidos y tenemos que ir con la misma mentalidad que hemos llevado a cualquier otro campo, a intentar aprovechar esa posible debilidad del Alavés.