Vitoria. El día después de salir a la palestra para desbloquear el proceso de capitalización del Deportivo Alavés, Javier Maroto -sus servicios jurídicos, en realidad- se puso manos a la obra dispuesto a buscar la fórmula más adecuada para avalar 800.000 euros del crédito de dos millones solicitado por el Baskonia a Caja Vital. En principio, la primera intención del próximo alcalde de Vitoria pasa por constituir una nueva sociedad pública que ejerza de avalista ante la imposibilidad de que sea el propio Ayuntamiento el encargado de hacerlo. Las bases de la futura sociedad de nueva creación, que los servicios jurídicos populares consideran totalmente viable, así como el resto de la documentación necesaria para el aval, estarán en manos de Caja Vital la próxima semana. Salvo retraso, la entidad financiera estudiará en su próxima comisión de riesgos, que se celebra cada miércoles por la tarde, los documentos aportados por el Consistorio para salvaguardar el crédito al grupo de empresarios comandado por el Baskonia.

La citada comisión, que hasta ahora ha negado una y otra vez el crédito al club azulgrana al exigir únicamente avales personales, tendrá el miércoles en su mano la posibilidad de poner punto final al culebrón en que se ha convertido la capitalización del Alavés. Así las cosas, Caja Vital tendrá sobre la mesa, por un lado, el aval de 800.000 euros del Ayuntamiento a través de una nueva sociedad, por otro, el millón de euros que los integrantes del grupo inversor avalan personalmente y, por último, los 200.000 euros del primer pago de la Diputación Foral de Álava a la entidad de Mendizorroza. En este punto, el principal escollo con el que se topará la operación será que la caja alavesa acepte la nueva empresa pública ideada por Maroto como un aval válido y, en caso afirmativo, que dé luz verde al crédito sin necesidad de que dicha sociedad esté plenamente constituida, lo que podría dilatar aún más si cabe un proceso agotador. Desde Caja Vital apuntaron ayer que este último -e importante- aspecto se estudiará con detenimiento y el sí definitivo dependerá de la documentación y los planes de futuro sobre la misma que presente el Consistorio.

En cualquier caso, si la constitución de una nueva sociedad no fuera finalmente viable, en el Partido Popular manejan como alternativa la posibilidad de avalar los 800.000 euros necesarios a través de alguna de las empresas municipales ya existentes -principalmente, Ensanche XXI- cambiando sus estatutos si fuera necesario con la intención de poder ejercer de avalista para una sociedad deportiva como el Deportivo Alavés. De cualquier forma, habrá que esperar al próximo miércoles para que la comisión de riesgos de la Vital estudie con detenimiento un aval que podría poner punto final al trasvase de poderes en el club albiazul.