Las pruebas médicas que se le practicaron en la jornada de ayer confirmaron las malas sensaciones que tenía el jugador desde el pasado domingo y el vizcaíno Igor Cuesta deberá estar de bajo durante las próximas tres semanas como consecuencia de una microrrotura fibrilar en los isquiotibiales. De esta manera, el central se pierde el epílogo de la fase regular aunque, si la recuperación se desarrolla según las mejores previsiones, podría llegar para disputar los play off de ascenso a Segunda.