Vitoria. Los tres últimos tropiezos no han provocado que Miguel Ángel Álvarez Tomé asuma un discurso negativo. El prepador leonés considera que su equipo está mejor de lo que dicen los resultados y por eso cree que contra el Mirandés no van a pesar esas tres semanas sin ganar. "No me preocupa nada del equipo, le veo mejor que nunca. No me preocupa nada en absoluto. Reconociendo que hemos estado mal en Barakaldo la segunda parte y que el otro día lo hicimos mal después del 1-2, pero es que para ese momento el marcador tenía que haber ido 3-0. En otros partidos hemos llegado y hemos hecho gol, hemos ampliado la ventaja y hemos ganado. El vestuario está perfecto. Esto es fútbol. El otro día el equipo debió ganar y perdió, pero hizo una de las mejores primeras partes, setenta minutos extraordinarios ante un gran equipo. Luego, decisiones que se escapan de nuestro control hicieron que no pudiéramos ganar", indicó el técnico albiazul tras el entrenamiento de ayer en Ibaia.

Augura Álvarez Tomé un partido "complicado" en Anduva, pero sigue confiando en la capacidad competitiva de sus jugadores. "Vamos a casa del tercero, que es un gran equipo, pero va a ser un partido igual de complicado que si fuésemos a La Muela, a Tafalla, a Barakaldo... Tengo el mismo respeto por todos. Sabemos que enfrente tenemos un buen equipo, pero somos capaces de competir. Tenemos que ser capaces de controlar el partido y no va a ser fácil ante un buen equipo. Hay que tener en cuenta que es el menos goleado, que se trata de un factor muy importante, pero arriba también tiene mucho peligro", indicó.

El preparador albiazul quiso restarle importancia al fenomenal ambiente que se va a vivir en Anduva, ya que considera que el Alavés ha estado respaldado por su afición en todos sus compromisos a domicilio. "Los que nos motivan son los tres puntos, que son nuestra obligación, sobre todo después de los últimos resultados. Que vaya a haber gente de Vitoria lo siento igual vayan mil que cuando vamos a Guijuelo y hay diez", concluyó el leonés.