Vitoria. Hay cosas difíciles de entender y una de ellas es que la directiva del Deportivo Alavés no haya anunciado todavía la extensión de la ampliación de capital a pesar de que el pasado jueves por la tarde decidió prorrogar dicho proceso hasta el próximo 31 de marzo, plazo que desde el club se estima más que suficiente para que salgan a la luz los posibles inversores.

En principio, la de ayer iba a ser la jornada decisiva para que se produjese el comentado anuncio, pero el esperado comunicado no vio finalmente la luz y su emisión queda de nuevo postergada sine die, aunque cabe esperar que se produzca la próxima semana. Alega la directiva que el presidente, Alfredo Ruiz de Gauna, no ha recibido una llamada directa por parte de la Diputación para conceder la prórroga que desde el ente foral se le solicitó hace poco más de una semana. Por su parte, y a través del propio diputado general en última instancia, desde la Diputación se considera que ya se han dado todos los pasos necesarios para que se prorrogue el proceso de ampliación y que la comunicación con el club se ha realizado de manera privada y también pública.

Tras varios días de deliberaciones con sus colaboradores más directos, y a pesar de su reticencia inicial al considerar que los dos meses de ampliación habían sido suficientes para que se completase la capitalización y apareciesen inversores, los directivos entendieron que dar un nuevo plazo al proceso era la mejor solución de futuro para el Alavés. Se optaba, de esta manera, por no seguir abriendo todavía más la brecha existente con la Diputación cumpliendo con la petición de ampliar el proceso durante un mes más tal y como se pidió desde el Palacio de la Provincia la semana pasada.

Desde la directiva se han intentado hacer oídos sordos a los continuos reproches que a lo largo de las últimas semanas ha vertido el Ejecutivo foral sobre le gestión de Ruiz de Gauna, pero los mandatarios alavesistas exigen ahora que el presidente reciba una llamada directa desde la cúpula de la Diputación para dar paso de manera definitiva a la tercera fase de una ampliación de capital que en estos momentos se encuentra en el limbo, ya que no está cerrada oficialmente -la directiva no ha dado los pasos necesarios para que el proceso concluya- pero tampoco está abierta porque no se pueden adquirir nuevos títulos. Cabe ahora esperar para saber si dicha llamada se produce y arranca la tercera fase de la ampliación.