vitoria. Mena volverá a medirse a su exequipo, en lo que para él, aunque no espere un "gran recibimiento" ya que no estuvo mucho tiempo, será "un partido especial" por la posibilidad de reencontrarse con viejos "amigos". Y eso que el de Talavera recuerda que su paso por Vitoria fue "raro", ya que en la etapa de Piterman los jugadores padecieron "muchas cosas".

Pese a todo "guarda un grato recuerdo", aunque fueron "años muy duros", en los que se vivió el descenso de Primera y otra salvación agónica en Segunda. Lo malo queda atrás, ya que aún y todo, Mena tiene en su memoria grabado que fue "una bonita etapa".

Sin embargo, no puede ocultar que el ucraniano, aunque mimase mucho a los jugadores, en el resto de aspectos "era un auténtico desastre". "Como futbolista nos trataba bien, pero dejó el club patas arriba. Dejó a todo el mundo tirado y lo que nos queda son cuatro amigos y un dinero que todavía no hemos visto".

Ahora el Alavés está pagando los desmanes cometidos por Piterman. Al menos, Mena ve la luz al final del túnel y cree que la llave de la salvación pasa por regresar cuanto antes a Segunda. "Lo que salvaría al club ahora es un ascenso. Eso sería como si le tocase la lotería. Llegaría el dinero de televisiones y quinielas".

El toledano cree que ese ansiado ascenso lo tiene el Alavés en su mano. "Tampoco lo veo muy complicado. Están arriba, haciendo buena temporada. Tiene un equipo para estar arriba, pero bueno, luego el play off es complicado. Ojalá el Alavés tenga la suerte de poder jugar el play off como primero, mejor que como segundo, tercero o cuarto y después tenga la suerte de ascender", confía.