sE suele decir que los proyectos ganadores están asentados en sólidas defensas que sirven para aprovechar sus oportunidades en ataque. Cumple a la perfección el Deportivo Alavés el segundo de estos apartados porque su capacidad goleadora está fuera de toda duda. El problema es su constante naufragio a la hora de cumplir el primero de estos puntos. La incapacidad defensiva albiazul se está convirtiendo en su principal lastre y se convierte en ocasiones en un obstáculo insuperable para sumar de tres en tres. Así se demostró ayer en la visita del Lemona a Mendizorroza. Tres goles del Glorioso no fueron suficientes para conquistar una victoria en casa. Un mal que hay que solucionar cuanto antes, el de un equipo que vive constantemente en los extremos y que es capaz de lo mejor cuando se vuelca al ataque y de lo peor en defensa.

La parte positiva de la balanza sigue situada en la capacidad realizadora de un equipo que no se ha quedado a cero en ninguno de los dieciséis compromisos ligueros que ha disputado hasta la fecha. Por tercera vez en lo que va de temporada, el equipo de Miguel Ángel Álvarez Tomé consiguió ayer marcar tres tantos. Las dos veces anteriores, contra Real Unión y Logroñés, le sirvieron para ganar, pero contra el Lemona no fue suficiente.

El sexto gol de la temporada de Jito y el quinto de Geni, que están cumpliendo a la perfección en sus labores, se vieron acompañados por el estreno de Javi Casas, que continúa con la tendencia realizadora de los defensas con las dianas en las últimas jornadas de Morcillo (Peña Sport y La Muela) e Igor Cuesta (Eibar). No es el gol un problema para un conjunto vitoriano que, a falta de la disputa de los partidos de hoy, vuelve a ser el máximo artillero del Grupo II con sus veintiocho dianas (1,75 goles marcados de media por partido).

catarata sobre montero Si la vanguardia es el orgullo de este Alavés, en la zaga se están encontrando los principales problemas. Por segunda vez en lo que va de temporada Alberto Montero encajó tres goles. La anterior, también en Mendizorroza, fue el Mirandés su particular verdugo.

No está teniendo ninguna fortuna el guardameta albiazul en lo que va de temporada, ya que es uno de los porteros más goleados del grupo. Quedan todavía por disputar todos los partidos de la jornada con excepción del Alavés-Lemona de ayer, pero en estos momentos el cuadro vitoriano es el quinto equipo más goleado del Grupo II.

Montero ya ha encajado diecinueve goles y solo ha sido capaz de dejar su portería a cero en tres ocasiones. La media de 1,19 tantos encajados por partido es demasiado alta para un equipo con aspiraciones de ascenso. Lo tiene claro un Álvarez Tomé que sabe que con tantos goles en contra es difícil afrontar los objetivos que se ha marcado el equipo. La pegada, contundente y mortal, es una gran virtud, pero queda eclipsada por los problemas para dejar la portería a cero.