Vitoria. "La enfermería está más llena que nunca", lamentaba ayer Manu Goienetxea, el médico del Deportivo Alavés. El buen inicio liguero del conjunto albiazul se ha visto empañado, en los últimos días, por el elevado número de jugadores que sufre algún tipo de lesión y que imposibilita al técnico babazorro, Miguel Ángel Álvarez Tomé, poder contar con todos los efectivos para las sesiones de entrenamientos y para los partidos semanales.

Si el lunes fueron las pertinentes pruebas médicas las que confirmaron que Geni sufre una rotura del ligamento lateral interno, que le mantendrá en el dique seco entre 6 y 8 semanas, ayer fue el turno para que el médico alavesista confirmara una nueva baja. Igor Cuesta sufre una microrrotura fibrilar en el bíceps femoral del muslo derecho.

Por lo tanto, el central albiazul estará fuera de los terrenos de juego otras dos semanas, por lo que se perderá, previsiblemente, los próximos tres partidos ligueros ante el Real Unión, contra el Logroñés (que se disputa entre semana) y ante la Gimnástica de Torrelavega.

Las lesiones le están provocando al defensa albiazul un auténtico calvario en este inicio de temporada. El vasco sufrió, a finales de pretemporada, una contractura en los isquiotibiales, que le ha imposibilitado jugar los tres primeros choques de la temporada.

El pasado domingo entró en la convocatoria frente el filial txuriurdin, pero el jugador seguía teniendo molestias y los servicios médicos del Alavés desestimaron la participación del central alavesista. "Llegó con molestias al partido del domingo. Al principio achacábamos esas molestias a la fatiga acumulada en los últimos días, pero la ecografía que le hicimos el lunes confirmó una rotura fibrilar en el bíceps femoral del muslo derecho", señaló ayer Manu Goienetxea.

Para el médico del equipo alavesista, la lesión de Igor Cuesta ha sido una "sorpresa", debido a que el jugador no ha sentido, en los últimos días, pinchazos ni estiramientos forzados, síntomas que, según el médico, aparecen en este tipo de lesiones. "No ha sido una recaída de la anterior lesión, son cosas totalmente diferentes. No esperábamos estos resultados porque el jugador no sentía pinchazos", declaró Goienetxea.

más problemas Igor Cuesta y Geni no son los únicos integrantes de la plantilla que sufren lesiones. Ander Alaña y Esparza tampoco se pudieron entrenar en la jornada de ayer con normalidad, si bien sus lesiones, afortunadamente, no son de tanta gravedad como las de Igor Cuesta y Geni. Alaña arrastra desde hace días molestias en el abductor del muslo derecho que no le han imposibilitado entrenar con normalidad junto con el resto de compañeros. Ayer, sin embargo, el central alavesista llevó a cabo ejercicios individuales para fortalecer la zona afectada. "Esperamos recuperarlo lo antes posible con estiramientos, carrera continua, un trabajo regenerativo básicamente. No es nada grave", indicó el médico. Por lo tanto, y salvo contratiempo de última hora, Ander Alaña estará disponible para el encuentro ante el Real Unión, el primer test serio del Alavés ante un conjunto recién descendido de categoría.

Otro jugador que sufre molestias es Fernando Esparza. En el entrenamiento matutino de ayer no completó la sesión preparatoria y se retiró antes de tiempo. El navarro sufre, desde hace un mes, molestias en el dorso del pie derecho debido a un plantillazo. "Ha notado molestias y hemos preferido que no entrenara. Si seguimos unas pautas y tratamos el dolor, no tendremos problemas para contar con él", señaló Goienetxea.

En diferente tesitura se encuentra Alberto Montero. El portero tiene problemas en el tobillo izquierdo que sólo se manifiestan cuando golpea el balón con la pierna derecha. El guardameta, no obstante, entrena con normalidad y el médico asegura que la lesión está "controlada".