vitoria. Desgraciadamente para los intereses de los conjuntos que militan en la categoría de bronce del fútbol español, raras son las oportunidades en las que consiguen atraer el interés mediático y aparecer en medios de comunicación fuera de sus fronteras. Sin embargo, el Unión Deportiva Logroñés cuenta con un as en la manga que le garantiza, cuando menos, un impacto notable. Y es que ha reclutado para su causa a un personaje habitual de los programas de corazón como José Campos.
El empresario cántabro, marido de Carmen Martínez Bordiú, fue presentado el pasado día 5 como el nuevo relaciones públicas de la escuadra riojana, que busca con su presencia dentro del organigrama aprovecharse del tirón con el que indudablemente cuenta para vender la marca.
Aunque pueda sorprender que un hombre que está estrechamente vinculado al Racing de Santander se embarque en un proyecto como éste, el propio Campos dejó claro que su presencia en el club blanquirrojo se debe exclusivamente a la relación de estrecha amistad que le une con el dueño, Félix Revuelta, y su familia. De hecho, según desvelaron al menos ambas partes, el trabajo desempeñado por el cántabro no será remunerado con compensación económica alguna y prestará sus servicios de manera altruista.
Pese a esta circunstancia José Campos, que en su juventud fue atleta de élite llegando a proclamarse en varias oportunidades campeón de España de salto de longitud y triple salto, se mostró ambicioso durante su presentación y no dudó en marcarse un objetivo que, a priori, tendrá bastante complicado poder cumplir. Y es que el empresario avanzó que confía en que el Unión Deportiva Logroñes cuente en el ejercicio que está a punto de comenzar con nada menos que 10.000 socios.
De momento, la entidad riojana únicamente ha sido capaz de alcanzar la cifra de los 2.500, por lo que muchas habilidades deberá demostrar Campos para superar el reto. Lo que ya ha logrado es que se hable del club mucho más de lo que se había hecho hasta su llegada.