VITORIA.- Tanto el cuerpo técnico como la plantilla alavesista han repetido, hasta la saciedad, que los amistosos disputados hasta ahora sólo sirven para coger forma. "Lo importante es llegar bien a principio de temporada. Cuando juguemos contra el Logroñes en Copa y ante el Caudal en Liga veremos un mejor Alavés" es otra frase muy repetida por parte de los jugadores.

Si nos atenemos estrictamente a los resultados, el balance final que presenta el Alavés en pretemporada es de tres victorias en los diez encuentros disputados. Más allá del marcador final, los partidos preparatorios han servido, sobre todo, para que Tomé perfile tanto el once inicial como el esquema a utilizar.

Eso sí, y al margen de probaturas, el Alavés ha demostrado en la mayor parte de los amistosos dos caras bien distintas. Volvió a ocurrir hace dos días contra el Numancia, con un equipo ramplón y escaso en la primera parte, y mostrando cara mucho más reconocible en la segunda.

Cuando los albiazules trabajan y se ponen las pilas, se puede ver un buen Alavés. En los partidos contra el Zaragoza, Athletic o Barakaldo así lo dejó patente. En cambio, las buenas sensaciones iniciales dejaron paso a la incertidumbre. Ante rivales de escasa identidad, como el Laudio o el Idoya, el conjunto babazorro mostró la otra cara de la moneda. Por tanto, objetivo claro: presentarse la próxima semana en Mendizorroza mostrando una sola versión, la buena.

Tres empates y cuatro derrotas completan el balance albiazul. Suficientes pruebas para vislumbrar las virtudes y carencias de un equipo al que sólo le sirve el retorno a la categoría de plata.

directrices claras Equipo versátil y con velocidad. Son las ideas que ha querido transmitir, desde el primer día, el nuevo técnico albiazul a sus pupilos. Además, Tomé ha dado especial importancia a la presión, que, según él, debe comenzar en la línea delantera para ahogar a la defensa rival. "La presión, o la hacemos todos, o no sirve para nada", ha sido una de las frases que más ha repetido el leones durante las intensas sesiones preparatorias en Ibaia.

Pocas jornadas de trabajo han servido para que Tomé haga buena su fama de entrenador duro y disciplinado. "Ahora mismo no somos un equipo como para pasar por encima a nadie", dijo Tomé para pedir a su plantilla humildad. Sabe, de primera mano, que en la categoría de bronce cualquier equipo puede ponerte en problemas. El Alavés, no obstante, ya pudo comprobarlo en sus propias carnes la pasada campaña

Los amistosos, eso sí, han servido para que Álvarez Tomé perfile el primer once inicial que pondrá en liza contra el Caudal en Liga. Lo ha puesto de manifiesto esta semana cuando, ante el filial del Athletic, alineó a los teóricos suplentes. Un día después, ante el Numancia, puso en el terreno de juego a los que, parece ser, formarán el primer once titular de la temporada. Entre ellos, se encuentran jugadores indiscutibles como Morcillo, Cuesta o los delanteros Geni y Jito.

Táctica ofensiva Precisamente uno de los aspectos que tiene claro el entrenador albiazul es la delantera. Álvarez Tomé ha apostado, en los últimos partidos por jugar con dos puntas, con Geni y Jito como protagonistas. Durante los primeros partidos, el entrenador incluyó en el once titular a un sólo delantero, pero el experimento no convenció a Álvarez Tomé y parece que se decanta, por lo menos para el inicio de campaña, por el 4-4-2. Y es que con este esquema el Deportivo Alavés ha tenido mucha más presencia ofensiva en los amistosos disputados. Sólo hace falta ver los números de la pareja Jito-Geni, que han marcado entre los dos cinco goles, para darse cuenta de la necesidad de jugar con dos puntas. La entrada de Geni en el once titular, jugador que el club declaró transferible en verano y que, finalmente, se quedará en Vitoria, abre un nuevo debate sobre la configuración de la plantilla.

Con la inclusión de Geni en la titularidad, y debido a los escasos efectivos que dispone el Alavés en la parcela ofensiva, la entidad alavesista se ha visto obligado a indultar a Óscar Martínez, delantero que fue descartado por la secretaría técnica en verano. Con todo ello, a no ser que se produzca una salida -poco probable por otro lado- parece que el jugador gallego tendrá finalmente ficha en el equipo.

Al margen de este aspecto, los goles albiazules parecen garantizados con Jito como principal referente ofensivo. La entidad del Paseo de Cervantes hizo un importante esfuerzo este verano para convencer al pichichi de la categoría que recalase en Vitoria. La falta de gol fue, precisamente, uno de los problemas que sufrió el Deportivo Alavés durante la pasada campaña.

Defensa sin definir Una de las líneas que parecen estar abiertas es la defensa, en especial el puesto de central. Igor Cuesta, con plaza asegurada, no tiene de momento acompañante fijo. Morcillo, que puede actuar como central, ha realizado una pretemporada mucho más productiva como lateral izquierdo, donde se ha congeniado bien con el interior izquierdo de turno, bien sea Óscar Rico o Salcedo. Otro jugador que puede jugar de central, Ander Alaña, ha venido realizando labores de pivote defensivo y tiene todas las papeletas de comenzar la competición liguera en ese puesto. El que, de momento, tiene más probabilidades de acompañar a Cuesta es Jon Moya, aunque su presencia sigue sin convencer al técnico leonés.

En la media, el Alavés se ha reforzado mucho y bien. Javi Casares y Calderón han demostrado desparpajo en los prolegómenos de la temporada donde, además, Ibón Gutiérrez y Carlos Indiano están llamados a ser los protagonistas para que la máquina albiazul carbure.

La plantilla la completan Álex Vallejo e Iván López de Calle, dos chavales del filial que han entrenado con el primer equipo durante la pretemporada y que esperan conseguir en junio, junto con el resto de compañeros, el ansiado ascenso a la categoría de plata.