Vitoria. Naturalizar el Deportivo Alavés de la temporada 2010-11. Ese es uno de los objetivos que con más insistencia -y convicción- se ha defendido desde la secretaría técnica albiazul una vez que sus actuales responsables tomaron posesión de su cargo. Tras el fiasco de los experimentos acometidos durante el pasado ejercicio, se quiere evitar a toda costa que los integrantes del nuevo proyecto que deben buscar el ansiado ascenso tengan que desperdiciar un tiempo precioso -del que no disponen- en adaptarse a su nuevo escenario competitivo.
Por eso, la definición del perfil que se debe buscar durante estas semanas de mercadeo se convirtió en una de las principales prioridades del club. Una vez dado este paso, llegó el momento de comenzar a trabajar en operaciones concretas y, de momento, lo cierto es que la práctica está cumpliendo con lo que apuntaba la teoría.
Y es que la identidad de los profesionales que ya han rubricado oficialmente su nueva vinculación con el Deportivo Alavés responde perfectamente a las características que recogía el retrato robot inicial. Empezando por el banquillo. Porque si de algo puede presumir Miguel Ángel Álvarez Tomé es de contar con una amplísima experiencia en el grupo norte de la Segunda División B, en el que ha cosechado notables éxitos. En consecuencia, conoce a la perfección los secretos del fútbol que se practica por estos lares y podrá trasladar a sus discípulos a las claves para completar una temporada exitosa.
Algo muy similar puede decirse de los jugadores que se han unido ya al proyecto albiazul. El primero en dar el paso fue el goleador Jito que, pese a ser catalán de nacimiento, arrastra a sus espaldas una amplia trayectoria en la que su última estación -este año en la Cultural Leonesa- le ha proporcionado los resultados más brillantes.
Por lo que respecta a Javi Casas y Jon Moya, ambos proceden de la cantera del vecino Athletic de Bilbao y el juego que se practica en la competición que disputarán a partir del próximo mes de agosto no tiene secretos para ellos. Además, también han militado en otros conjuntos de la categoría en los que han podido ampliar su experiencia. Aunque todavía no se han confirmado oficialmente, el navarro Fernando Esparza y el vitoriano Asier Salcedo serán los siguientes en llegar y sus expedientes son muy similares al de sus compañeros. Parece por lo tanto que este nuevo Alavés será perfectamente reconocible.