Vitoria. Las últimas horas no han sido las mejores para un Joseba Arriaga que se perdió el entrenamiento del miércoles por culpa de un proceso febril que todavía no ha desaparecido pero que considera que no le va a afectar de cara a participar en el choque del próximo domingo contra el Celta B, un compromiso en el que, como recuerda el ermuarra, el Deportivo Alavés se jugará las opciones de seguir dependiendo de sí mismo para clasificarse para el play off.
"Llevamos tres jornadas en las que no hemos sido capaces de ganar y esta semana nos jugamos mucho porque si ganamos dependeríamos de nosotros mismos en el último partido, que es una oportunidad que no podemos dejar escapar. Ahora son auténticas finales porque sólo quedan dos partidos", explicó.
Reconoce el mediapunta vizcaíno que el equipo ha pasado por una "semana complicada porque se nos fueron dos puntos muy importantes y nos jugamos mucho ahora en Vigo. Va a ser un partido muy difícil y la gente está mentalizada. En fútbol puede pasar cualquier cosa, pero tenemos muchas opciones de ganar este partido".
Tensión y nervios son dos de las principales palabras del particular diccionario albiazul a lo largo de las últimas jornadas y Arriaga considera que tiene que existir una buena combinación entre ambas para conseguir la victoria.
"Tiene que haber de las dos cosas. Hay que salir al partido con un punto de tensión e incluso de nervios, pero tiene que ser positivo, saber encauzarlo. Queríamos estar en esta situación, dependiendo de nosotros mismos para entrar en el play off y lo tenemos en nuestra mano a pesar de los tres últimos resultados. Como se suele decir, hay que sacar el primer córner, hacer la primera falta y el primer tiro. Si podemos marcar pronto sería muy importante. Todos queremos jugar bien, pero lo importante son los tres puntos", señaló el futbolista albiazul, convencido de que en Vigo se pondrán en juego buena parte de las opciones del Alavés de clasificarse para el play off.
Tras tres compromisos consecutivos en los que el conjunto vitoriano no ha sido capaz de ganar, Arriaga espera que desaparezcan esas dificultades para hacerse con el triunfo en un duelo en el que no augura facilidades: "Podemos mejorar. Estos tres últimos partidos no hemos conseguido ganar. Hemos jugado contra buenos rivales como el Palencia y la Ponferradina y la semana pasada, cuando mejor lo teníamos, no supimos cerrar el partido. Ahora viene un partido complicado porque el Celta no se está jugando mucho y le querrá hacer un favor al Pontevedra. Pero son cosas que tienen que quedar al margen y ganar nosotros el partido".
Además, Arriaga considera que una posible victoria puede tener el valor añadido de colocar la presión sobre el resto de rivales, que juegan unas horas más tarde que el conjunto vitoriano. "Jugamos antes que el resto, al revés que las semanas anteriores, y si sacamos los tres puntos a la mañana el Pontevedra saldría sabiendo que o gana o no nos coge. Además, el Lemona está haciendo muchos goles, juega alegre y tiene posibilidades. Se juega la Copa, pero no tiene presión. Lo primero es hacer nosotros los deberes y ganar", concluyó.