La presidenta del PNV en Álava, Jone Berriozabal, ha rechazado la propuesta de EH Bildu de negociación conjunta para las cuentas de 2026 de las principales instituciones vascas, y ha asegurado que "los presupuestos de la Diputación Foral de Álava solo se van a negociar en Álava" y no "en ningún otro territorio, ni en ningún paquete conjunto con otras cuestiones".
En una entrevista concedida a Radio Vitoria, recogida por Europa Press, Berriozabal ha reiterado la disposición de su partido para acordar los presupuestos de 2026, un debate que ha apelado a abordar "con serenidad, con tranquilidad, con discreción, mesa a mesa, institución a institución".
Por su parte, el PNV está dispuesto a "dar lo mejor" para llegar a un acuerdo, si bien ha advertido, los jeltzales no pueden "hacerlo solos". Así, ha dicho tener "la mano tendida a todos los grupos parlamentarios para poder abordar esa negociación presupuestaria".
La presidenta del ABB ha rechazado que, como propone EH Bildu, las cuentas de 2026 se negocien de manera conjunta para Gobierno Vasco y diputaciones. Según ha indicado, el PNV "siempre negocia los presupuestos institución a institución, mesa a mesa" y, en consecuencia, "los presupuestos de la Diputación Foral de Álava solo se van a negociar en Álava, en ningún otro territorio, ni en ningún paquete conjunto con otras cuestiones".
SIN PRIORIDAD NI VETOS
Del mismo modo, ha asegurado que EH Bildu no va a tener "una prioridad" en la negociación presupuestaria ni se va a "vetar a otros grupos parlamentarios".
"Es evidente que no vamos a llegar a un acuerdo presupuestario con Vox, pero vamos a estar abiertos a negociar con todos, y esperamos lograr esa buena disposición también para poder llegar a unas cuentas públicas que sean capaces de dar respuesta a las necesidades que tenemos en cada territorio, en cada ayuntamiento del territorio y poder afrontar el año 2026 con nuevos proyectos, nuevas estrategias, nuevas líneas de trabajo", ha insistido.
NO VE "UN PROBLEMA DEL PSE CON EL PNV"
Por otra parte, Berriozabal, no ve "en peligro" la estabilidad del Gobierno Vasco pese a las discrepancias con el líder del PSE-EE, Eneko Andueza, y ha afirmado que no hay "un problema del PNV con el Partido Socialista ni del Partido Socialista con el PNV", sino "una cuestión personal de Andueza".
Tras advertir que los jeltzales "ni hacen advertencias ni las admiten", ha afirmado que "las puertas siguen tan abiertas como en el pasado" con los socialistas a nivel de Euskadi y del Estado.
La presidenta de la Ejecutiva alavesa del PNV ha dicho que no comparten "esa manera de hacer política, esa facilidad para tensionar y enrarecer las relaciones" que, a su entender, tiene el secretario general de los socialistas vascos.
En todo caso, ha considerado que "no es un problema del PNV con el Partido Socialista, ni siquiera del Partido Socialista con el PNV", sino "una cuestión personal de Andueza con el PNV".
Según ha asegurado, los jeltzales, por su parte, van a seguir "apostando por tender puentes, en mantener ámbitos de confianza, de trabajo". "Ni hacemos advertencias ni vamos a admitir advertencias, lo que queremos es dar el mejor servicio a la ciudadanía vasca, cumplir un acuerdo de gobierno suscrito por ambos partidos y a eso nos vamos a dedicar", ha asegurado, subrayando que el PNV "está a lo que tiene que estar".
En esta línea, ha afirmado que su partido "no ha cambiado ni un ápice su relación con el Partido Socialista" y, así, sus "puertas siguen estando tan abiertas como la han estado en el pasado, tanto a nivel de Euskadi como a nivel del Estado español", donde el presidente del PNV, Aitor Esteban, tiene "una relación magnífica con los jefes de Andueza".
En todo caso, Jone Berriozabal no cree que esté "en peligro" la estabilidad del Gobierno porque "debe primar, frente a los intereses partidistas, la agenda vasca, Euskadi y los intereses de Euskadi".
En lo que respecta a diferencias entre PNV y PSE-EE en relación a la iniciativa para blindar los requisitos lingüísticos en las OPE de las instituciones vascas planteada por los jeltzales, ha precisado que en el programa de gobierno suscrito entre ambos partidos "existe un compromiso de garantizar el uso de la lengua oficial escogida por cada persona para relacionarse con las administraciones públicas vascas". "Esto está pactado y suscrito por el PSE también", ha remarcado.
El objetivo del PNV, ha subrayado, es "garantizar la seguridad jurídica" de las ofertas públicas de empleo y "ofrecer un escenario de certeza" a las administraciones que ponen en marcha esas OPE y también a "los miles de opositores, de opositoras, que se están jugando mucho en estos procesos y no quieren que se queden ahí colgados sine die".
Tras la toma en consideración de la propuesta en el Parlamento Vasco, el PNV va a "trabajar para llegar al máximo consenso posible" con el objetivo de "garantizar los derechos lingüísticos de la ciudadanía vasca".
CHEQUE EN BLANCO
Por otro lado, la dirigente del PNV alavés ha precisado que su partido "nunca va a dar un cheque en blanco a Pedro Sánchez ni a ningún gobierno del Estado español para que se mantengan en esa posición". "Siempre será si respetan la agenda vasca, los intereses de Euskadi en cada momento", ha matizado.
Asimismo, ha considerado "una absoluta contradicción" que se "diga un día que el PNV fue el último en incorporarse un acuerdo para que Pedro Sánchez sea presidente y en otros momentos decir que somos fundamentales".
En todo caso, ha reiterado que el PNV no va a "dar ningún cheque en blanco, a diferencia de lo que ocurre con otras formaciones como EH Bildu, con el que el Partido Socialista no necesita ni negociar porque, ya antes de comenzar a debatir, ya cuenta con los votos de la izquierda abertzale".
CENTRO DE REFUGIADOS
Por otra parte, ha reiterado el rechazo de su partido al proyecto de centro de refugiados de Arana en Vitoria "tal como está concebido", con "350 personas en su origen y ahora, al parecer, 200 personas". Según ha explicado, para el PNV "el mayor problema tiene que ver con el modelo" planteado porque "choca frontalmente con el modelo vasco de acogida".
Por ello, ha dicho no entender "cómo el Partido Socialista está empeñado en traer a Vitoria-Gasteiz este proyecto que cuenta con un rechazo social muy importante, que se quiere imponer unilateralmente a la ciudad". "No me cabe en la cabeza cómo una alcaldesa puede querer imponer este tipo de proyectos en la ciudad cuando tiene a toda la ciudad en contra", ha señalado.
Según ha indicado, el PNV ha tenido "la mano tendida desde el año 2022, 2023, 2024 a hablar sobre cómo debiera ser" el centro, pero "desde luego ni 350 ni 200". A su entender, "esto empieza a parecer un zoco", en el que, ha subrayado, su partido "no va a participar".
Berriozabal ha recordado que los jeltzales han presentado iniciativas solicitando la paralización del centro de refugiados "tal como está concebido el proyecto" en distintas instituciones y su posición "es clara, es firme" y, por tanto, "son otros los que tienen que adoptar un viraje en esa propuesta que están haciendo si no quieren tener a toda la ciudad en contra".