La vendimia se acerca a Rioja Alavesa. Salvo catástrofes meteorológicas en forma de lluvias torrenciales o, sobre todo, granizo, las primeras cuadrillas de trabajadores pisarán los viñedos la próxima semana para recoger las variedades más tempranas, que coinciden con las que soportan uva blanca.
Hasta entonces, ya se atisban certezas sobre lo que se encontrará en las vides: menor cantidad por los estragos meteorológicos sufridos, aunque el estado de salud de la uva llamada a convertirse en alguno de los mejores vinos del mundo se encuentra en estado óptimo y dentro de los parámetros que se presuponen a estas alturas del año. Así lo han corroborado los equipos técnicos de la DOCa Rioja.
Con ello, la comarca vitivinícola por excelencia en el territorio histórico se prepara para una campaña “corta y rápida”, tal y como la enmarcó hace escasos días el jefe del Servicio de Viticultura y Enología de Agricultura de la Diputación alavesa, Jaime Ibáñez de Elejalde. Al parecer, hay menos uva y, por ende, esta madura en mejores condiciones de rapidez y calidad.
“Se percibe una evolución correcta del peso de la baya, con valores dentro de la normalidad o ligeramente por encima de la media”
Sea como fuere, los datos aportados este jueves por la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja, enseña que ampara los caldos alaveses nacidos al amparo de Sierra Cantabria y de las aguas del río Ebro avisan de una evolución con parámetros normales.
Según pudo confirmar DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA tras analizar el tercer Boletín de Maduración del Consejo Regulador, órgano de gobierno de la DOCa, las uvas y los racimos en Rioja Alavesa evolucionan de manera adecuada según los parámetros de normalidad.
El citado informe especifica que en la comarca “se percibe una evolución correcta del peso de la baya, con valores dentro de la normalidad o ligeramente por encima de la media”. Entre las principales conclusiones del análisis realizado el 1 de septiembre, “se observan también unos parámetros de acidez y Ph correctos, siendo necesario prestar especial atención a su evolución, así como una ralentización en los parámetros de madurez fenólica, muy probablemente, según señalan desde los servicios técnicos del Consejo, debido a las precipitaciones del día 31 de agosto”.
"En las parcelas afectadas por granizo el pasado día 31 es imprescindible un especial y continuo seguimiento de la evolución de la uva, comprobando el correcto desecado de las bayas afectadas y haciéndose necesaria su rápida vendimia"
Estado vegetativo óptimo
La DOCa prosigue con sus conclusiones para confirmar que el estado vegetativo y sanitario del viñedo es óptimo, si bien en las parcelas afectadas por granizo el pasado día 31 es imprescindible un especial y continuo seguimiento de la evolución de la uva, comprobando el correcto desecado de las bayas afectadas y haciéndose necesaria su rápida vendimia en aquellos con pérdida total o casi total de masa foliar.
Pese a los datos que avalan una evolución normal del viñedo para estas alturas del año, el sector no obvia que la campaña que está a un paso de empezar estará marcada por la “importante reducción” aprobada por la DOCa Rioja para los rendimientos máximos del viñedo, que varía considerablemente de un municipio a otro, con la intención de “limitar la producción y contener los excedentes”, tal y como recordó hace unos días Ibáñez de Elejalde en una entrevista a Onda Vasca. Entonces, este explicó que los reducidos topes de producción, publicados por el Consejo Regulador prevén una vendimia más rápida.
“La vendimia va a ser corta porque el descenso de producción es muy considerable. La cantidad de referencia suele ser de 6.500 kilos por hectárea pero este año en algunos municipios puede ser de 1.950 kilos, por lo que la reducción es increíble”
Buena calidad
“La vendimia va a ser corta porque el descenso de producción que se va a producir este año es muy considerable. La cantidad de referencia que suele haber en Rioja son los 6.500 kilos por hectárea, que estos últimos años había sido reducida, pero este año, el Consejo Regulador ha publicado máximos en algunos municipios de Rioja Alavesa de incluso 1.950 kilos, por lo que la reducción es increíble”, señaló.
En aquella entrevista, el técnico recordó que el ajuste realizado por la DOCa Rioja ofrece una panorama dispar en Álava, ya que se realiza por municipios. Así, tal y como expuso Ibáñez de Elejalde, en Yécora se podrán recoger hasta 5,2 toneladas de uva; en Lanciego y Labastida 5; para pasar a las 3,7 toneladas en Baños de Ebro, Elciego y Villabuena, los pueblos más afectados por esta “importante reducción”.
El jefe del servicio foral de Viticultura y Enología de Álava indica que la vendimia empezará la primera semana de septiembre para las variedades más tempranas. “Se espera poca producción, pero con una calidad de la uva muy buena”, ya que “lo que hay está en un estado sanitario buenísimo”.