Las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) se han disparado en el territorio alavés en el último lustro, y especialmente tras la pandemia. Así lo reflejan los datos recogidos en el informe Plan del Sida y de Infecciones de Transmisión Sexual 2022, elaborado por Osakidetza y el Departamento de Salud del Gobierno Vasco, en el que sobresalen algunas de las enfermedades más habituales, como la clamidia, la gonorrea y la sífilis.
“El covid supuso un parón, después , la gente se ha vuelto a preocupar por hacerse las pruebas”
En 2018 Osakidetza detectó 286 infecciones por estas tres infecciones, y un año más tarde los casos crecieron hasta los 495. En el año de la pandemia, 2020, la cifra se elevó hasta los 528 contagios, y fue un año después, ya con menos restricciones, cuando las infecciones de transmisión sexual registraron un pico más que notable, con 853 casos detectados de clamidia, gonorrea y sífilis.
El año pasado la situación se estabilizó, con 654 infecciones, pero en todo caso se trata de una cifra todavía superior a las reflejadas antes del covid.
“El covid supuso un parón, después de pasar la pandemia, la gente se ha vuelto a preocupar por hacerse las pruebas”, expone en ese sentido Blanca Bastida, presidenta de la Comisión Antisida de Álava (Sidálava).
En todo caso, la situación continúa siendo alarmante. Así lo destaca la presidenta. “La realidad es que las ITS están disparadas, llevan unos años de crecimiento continuo”, afirma.
En la misma línea, Bastida señala que, en la asociación, en lo que va de 2023, han realizado un total de 57 derivaciones a consulta en hospital tras detectar ITS. “La inmensa mayoría nos hablan de que tienen síntomas muy claros” apunta.
“La realidad es que las infecciones de transmisión sexual están disparadas, llevan unos años de crecimiento continuo”
Si se realiza una distinción por enfermedades de transmisión sexual en los últimos cinco años, tal y como se recoge en el plan, en el caso concreto de la clamidia, los 165 positivos de 2018 se elevaron a 280 en 2019 y bajaron a 266 en 2020, para dispararse hasta 346 en 2021, previo a un ligero descenso el año pasado con 302 casos.
Por otro lado, en 2018 se dieron un total de 68 nuevos casos de gonorrea, por los 94 de 2019, los 184 de 2020 y los 374 de 2021. En 2022, la cifra se establece en 277. Respecto a la sífilis, los 55 casos de 2018 subieron a 121 en 2019 y bajaron a 78 diagnósticos de Álava en 2020, para pasar a 133 en 2021. Un dato que el pasado año logró posicionarse en 75.
EN EUSKADI
Si se amplia la lupa al territorio vasco en su conjunto, se puede observar cómo el año pasado, en las tres consultas hospitalarias principales, los diagnósticos de clamidia aumentaron un 54,5%; los de infecciones por gonorrea un 105,2%, mientras que los de sífilis lo hicieron un 41,7%.
Porcentajes que la presidenta de la asociación ha traducido en cifras concretas. “Se contabilizaron en Euskadi un total de 1.049 nuevos casos de clamidia, 983 de gonorrea y 282 de sífilis”, detallaba Bastida.
TRES ÚLTIMOS AÑOS
- Clamidia. Los 165 positivos de 2018 se elevaron a 280 en 2019 y bajaron a 266 en 2020, para dispararse hasta 346 en 2021, previo a un ligero descenso el año pasado con 302 casos.
- Gonorrea. En 2018 se dieron un total de 68 nuevos casos de gonorrea, por los 94 de 2019, los 184 de 2020 y los 374 de 2021. En 2022, la cifra se establece en 277.
- Sífilis. Los 55 casos de 2018 subieron a 121 en 2019 y bajaron a 78 diagnósticos de Álava en 2020, para pasar a 133 en 2021. Un dato que el pasado año logró posicionarse en 75.
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Blanca Bastida: “La inmensa mayoría nos hablan de que tienen síntomas muy claros”
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“Se contabilizaron en Euskadi un total de 1.049 nuevos casos de clamidia”
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