La alta incidencia de los virus respiratorios durante este invierno está suponiendo una losa adicional para el personal sanitario de Álava, ya de por sí saturado por la creciente falta de profesionales y sin haber podido recuperarse aún del impacto de la pandemia.

Con la bronquiolitis infantil –primero– y la gripe –después– como grandes protagonistas, las consultas de los centros de salud y los hospitales han sufrido momentos críticos desde las últimas semanas de 2022 y los profesionales anhelan ya la llegada de una meteorología más benigna para poder pasar página.

La situación de las consultas, por fortuna, se ha aliviado –al menos levemente– en estos últimos días según distintas fuentes consultadas por este periódico y los últimos datos hechos públicos por el Departamento de Salud parecen hacer divisar también esa luz al final del túnel.

La actividad gripal, que hace dos semanas alcanzó el pico de la temporada, ha “detenido” el aumento de las últimas semanas en la atención primaria del territorio y la detección del virus también se ha ralentizado a nivel hospitalario. Además, la incidencia tanto del covid-19 como de otros virus respiratorios “se mantienen bajas”, según el último informe de la dirección de Salud Pública y Adicciones, fechado este pasado miércoles 8.

La tasa de incidencia de la gripe se situó en la OSI Araba durante la semana comprendida entre los pasados 27 de febrero y 5 de marzo, última con datos disponibles, en los 494,25 casos por cada 100.000 habitantes, 33 puntos menos que en los siete días previos. La tasa de bronquiolitis sí que ascendió levemente en el territorio, por encima de los 200 casos por 100.000, aunque muy lejos de los cerca de 1.700 que registró a las puertas de diciembre.

Cayeron igualmente los casos de infección respiratoria aguda grave, que requieren ingreso hospitalario, con una tasa en el entorno de los 13 casos por cada 100.000 habitantes en el territorio histórico.

18 casos por 100.000

El covid, entretanto, continúa en cotas mínimas, hasta el punto de que el Departamento vasco de Salud ha dejado de ofrecer datos desglosados por provincias desde hace dos semanas. La tasa de incidencia del virus se situaba el pasado día 5 en unos exiguos 18,22 casos por cada 100.000 habitantes. La variante ómicrom acaparó el 38% de los diagnósticos.